Teoría del Cambio Otro mundo es posible

previamente establecido en la Constitución federal […]. d) Tanto la federación como los estados
miembros tienen capacidad tributaria directa para recaudar impuestos.” 721
En la definición propuesta por Fransesc de Carreras ya encontramos signos claros del
verticalismo, centralismo y universalismo, cuando habla de “un Estado unitario con fines
generales”. Y los dos ejemplos de federalismo que nos propone, Estados Unidos y Alemania,
efectivamente adolecen de estas deficiencias. Además de que, en ambos casos, la economía se
encuentra íntimamente ligado a la política, ya sea a nivel de Estado local o de Estado de la
Federación.
Daniel J. Elazar (1934-1999) fue profesor de la universidad Temple en Filadelfia. Fundó y
dirigió uno de los institutos más prestigiados sobre el federalismo en Estados Unidos, el “Center
for the Study of Federalism”. Dentro sus libros podemos señalar, entre otros, The American
Partnership; American Federalism, Exploring Federalism.
En su artículo “Are we a nation of cities?”, 722 Elazar anota que “está generalmente aceptado
que los Estados Unidos es ahora ‘una nación de ciudades’, para usar la frase popularizada por
Lyndon B. Johnson. […] Los fundamentos de este mito se encuentran el ‘hecho’ de que más
del 70% de americanos vive ahora en lugares urbanos.” Este “hecho” nos daría la impresión,
en efecto, de que los americanos estarían viviendo un federalismo al estilo de Bakunin, como
lo veremos luego.
Sin embargo, remarca el profesor Elazar, “este ‘hecho’ debe ser considerado solamente en el
contexto propuesto por la Oficina de Censos de los Estados Unidos, cuya definición de ‘lugar
urbano’ es cualquier asentamiento humano de 2.500 personas o más. [Puesto así, este mito
central], ‘una nación de ciudades’, nos evoca una visión de 200 millones de americanos
viviendo codo a codo a lo largo de calles abarrotadas de gente, buscando sus diversiones en
teatros o salas de concierto y sufriendo las incomodidades de vivir bajo condiciones de grave
congestión de personas.”
Por su parte, Mijail Bakunin, político anarquista, señala “que para hacer triunfar la libertad, la
justicia y la paz de las relaciones internacionales de Europa […], se debe constituir los Estados
Unidos de Europa.” 723 ¿Y qué debemos entender por ‘Estados Unidos de Europa’?
La respuesta de Bakunin es precisa: los Estados Unidos de Europa es “la federación libre de los
individuos en las comunas, de las comunas en las provincias, de las provincias en las naciones,
en fin, de éstas en los Estados Unidos de Europa primero y más tarde del mundo entero.” 724
El texto de Bakunin es de 1868, momento de gloria para el pueblo americano, en donde el
Proceso Artificial de Producción se está desenvolvimiento a la máxima velocidad y con mejores
resultados que en la matriz, Inglaterra. Bakunin no se impide en señalar que ahí se están
pagando salarios mejores que en Inglaterra, en plena euforia de un Federalismo. Ese “saludable
principio del Federalismo, principio sobre el cual nos han dado, por lo demás, una demostración
triunfante los últimos acontecimientos en los Estados Unidos de América del Norte?” 725
Bakunin no escapa a la jerarquía y a la decisión centralizada. No podía ser de otra manera,
porque la actividad socio-económica de Estados Unidos se estaba desarrollando en base al
721
Idem
722
ELAZAR Daniel J., Are we a nation of cities?
723
BAKUNIN Mijail, [1868] Federalismo, socialismo y antiteologismo, B erna, Suiza, p. 9
724
BAKUNIN Mijail, [1868] Federalismo, socialismo y antiteologismo, B erna, Suiza, p. 9-10
725
Idem, p. 7-8
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