08.05.2013 Views

fabricantes de rebelion

fabricantes de rebelion

fabricantes de rebelion

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

expresada a través <strong>de</strong>l sentimiento <strong>de</strong>l ¨compromiso consciente¨ con una causa, en otras<br />

palabras, el manejo <strong>de</strong> un <strong>de</strong>seo colectivo entendido y querido. Trascien<strong>de</strong> por tanto el<br />

ámbito <strong>de</strong> la interpersonalidad o <strong>de</strong> las costumbres morales y se convierte en un código<br />

que sirve a la constitución <strong>de</strong>l nuevo sujeto social.<br />

Pues bien, si hay algo que se consagra en Yare como una fuerza <strong>de</strong>terminante es<br />

esa moral <strong>de</strong> la lealtad, asumida por una multiplicidad cada vez mayor <strong>de</strong> individuos<br />

que se salen o sencillamente evitan el vanguardismo <strong>de</strong> la moral <strong>de</strong>l compromiso para<br />

convertirse en reproductores <strong>de</strong> una vieja moral <strong>de</strong> resistencia como camino para el<br />

estrechamiento <strong>de</strong> las relaciones pueblo-comandante. Un aparente anacronismo ético<br />

pero que sin duda tuvo muchísimo mérito a la hora <strong>de</strong> vislumbrar la formación <strong>de</strong><br />

repúblicas en estas tierras <strong>de</strong>s-graciadas, y que ahora retorna empujado por la<br />

ancestralidad <strong>de</strong> su fuerza y el clima <strong>de</strong> <strong>de</strong>scomposición generalizado <strong>de</strong>l tejido material<br />

y espiritual <strong>de</strong> la sociedad. Esta conversión <strong>de</strong>l sujeto <strong>de</strong> la rebelión <strong>de</strong> la moral <strong>de</strong>l<br />

compromiso hacia una moral <strong>de</strong> la lealtad, en un principio fue muy mal tomado, como<br />

un ¨bicho raro¨ que le había picado a un poco <strong>de</strong> gente (como <strong>de</strong>cía: <strong>de</strong> esos que les<br />

encanta ¨pararse firme¨), pero pasado el tiempo se fue notando que no se trataba <strong>de</strong><br />

ningún esnobismo psicológico promovido por unos cuantos; era la fuerza cohesionadora<br />

fundamental para la constitución <strong>de</strong> un nuevo po<strong>de</strong>r. No era el futurista ¨hombre nuevo¨<br />

<strong>de</strong>l Che y que tanto pregonamos por las calles lo que ahora resplan<strong>de</strong>cía, era una vieja<br />

moral que sirvió en antaño para <strong>de</strong>strozar la sumisión al colonialismo español o más<br />

a<strong>de</strong>lante para resistir a los primeros embrujamientos <strong>de</strong> la sociedad disciplinaria<br />

capitalista, llamada en ese entonces ¨civilización¨. Ella reaparecía en ese movimiento <strong>de</strong><br />

¨eterno retorno¨ a las esencias heroicas que inspiraba Chávez. El primer <strong>de</strong>bate<br />

i<strong>de</strong>ológico se dirime entonces en esta opción moral, en esta cultura <strong>de</strong>l trato, y no en las<br />

frías y académicas i<strong>de</strong>as. De hecho los documentos programáticos que salen <strong>de</strong> Yare<br />

para esos momentos son bastante calamitosos; lo que cohesiona no son las i<strong>de</strong>as es la<br />

actitud, la moral, la cultura <strong>de</strong>s<strong>de</strong> don<strong>de</strong> florece el hecho colectivo. La moral <strong>de</strong> la<br />

lealtad reemplaza la i<strong>de</strong>ología como cemento cohesionador.<br />

Por supuesto, este primer motor <strong>de</strong>s<strong>de</strong> don<strong>de</strong> brota la energía para constituir el<br />

movimiento chavista en tanto tal, en tanto liga estructurada y más tar<strong>de</strong><br />

institucionalizada <strong>de</strong> individuos, no pasa en vano <strong>de</strong>s<strong>de</strong> un punto <strong>de</strong> vista cualitativo. La<br />

moral <strong>de</strong> obediencia <strong>de</strong> los <strong>de</strong>spotismos, la moral <strong>de</strong> la culpa <strong>de</strong>l cristianismo, la moral<br />

<strong>de</strong> la negociación <strong>de</strong>l capitalismo, la moral <strong>de</strong>l ¨todo vale¨ <strong>de</strong>l postmo<strong>de</strong>rnismo y la<br />

globalización, la moral <strong>de</strong> lealtad <strong>de</strong>l caudillismo igualitario, o la moral emancipatoria<br />

<strong>de</strong>l compromiso, ninguna <strong>de</strong> ellas es intercambiable por cualquier regulación i<strong>de</strong>ológica.<br />

La posibilidad <strong>de</strong> un ¨te cambio moral por i<strong>de</strong>ología¨ para equilibrar los contenidos <strong>de</strong>l<br />

capital subjetivo, aún no entra al mercado. Al consolidarse las relaciones <strong>de</strong> lealtad <strong>de</strong><br />

alguna manera se le está dando la bienvenida a sus respectivos <strong>de</strong>rivados i<strong>de</strong>ológicos<br />

(entendida i<strong>de</strong>ología no como ¨falsa conciencia¨ o como espacio superestructural <strong>de</strong>l<br />

or<strong>de</strong>n social, sino como aquello que dota <strong>de</strong> sentido trascen<strong>de</strong>nte a las prácticas sociales.<br />

Para mejor información remitimos a la “Genealogía <strong>de</strong> la moral” <strong>de</strong> Nietzsche).<br />

No hay relación mecánica o causal entre moral e i<strong>de</strong>ología, pero sin duda que los<br />

significados <strong>de</strong> los signos revolucionarios que hasta ahora habían hegemonizado el<br />

movimiento <strong>de</strong> rebelión, ahora van a ser mutados profundamente al convertirse a la

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!