09.05.2013 Views

Tercer Testamento - El Libro de la Vida Verdadera

Tercer Testamento - El Libro de la Vida Verdadera

Tercer Testamento - El Libro de la Vida Verdadera

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Así como veis que los pueblos y <strong>la</strong>s potencias <strong>de</strong> <strong>la</strong> Tierra se arman para <strong>la</strong> lucha, así también <strong>la</strong>s distintas religiones se<br />

aprestan para dar <strong>la</strong> batal<strong>la</strong>.<br />

14 Es menester que por un instante se cierren los Cielos para todos, y que sólo se vuelvan a abrir hasta que un solo<br />

c<strong>la</strong>mor sea el que se eleve <strong>de</strong> <strong>la</strong> Tierra, reconociendo que es uno sólo el Padre <strong>de</strong> todos los seres.<br />

De Enseñanza 152<br />

21 Ve<strong>la</strong>d y orad, pueblo, no sólo por los peligros materiales, sino también por <strong>la</strong>s asechanzas que vuestros ojos no<br />

alcanzan a distinguir, aquél<strong>la</strong>s que provienen <strong>de</strong> seres invisibles.<br />

22 Las gran<strong>de</strong>s legiones <strong>de</strong> espíritus turbados, aprovechando <strong>la</strong> ignorancia <strong>de</strong> <strong>la</strong> Humanidad, su insensibilidad y su falta<br />

<strong>de</strong> vista espiritual, le hacen <strong>la</strong> guerra, y los hombres no han preparado sus armas <strong>de</strong> amor para <strong>de</strong>fen<strong>de</strong>rse <strong>de</strong> sus<br />

ataques, por lo que ante esa lucha aparecen como seres in<strong>de</strong>fensos.<br />

23 Era menester que llegara a vosotros mi Doctrina espiritual, para enseñaros cómo <strong>de</strong>béis prepararos para salir<br />

victoriosos en esa contienda.<br />

24 De aquel mundo invisible que palpita y vibra en vuestro propio mundo, parten influencias que tocan a los hombres, ya<br />

sea en su mente, en sus sentimientos o en su voluntad, convirtiéndolos en siervos sumisos, en esc<strong>la</strong>vos, en<br />

instrumentos, en víctimas. Por doquiera surgen manifestaciones espirituales y, sin embargo, el mundo sigue sin querer<br />

darse cuenta <strong>de</strong> lo que ro<strong>de</strong>a a su espíritu.<br />

25 Es necesario entab<strong>la</strong>r <strong>la</strong> batal<strong>la</strong>, <strong>de</strong>struir <strong>la</strong>s tinieb<strong>la</strong>s, para que cuando se haga <strong>la</strong> luz en los hombres, todos se<br />

levanten unidos en una verda<strong>de</strong>ra comunión y con <strong>la</strong> oración triunfen en <strong>la</strong> lucha que emprendan contra <strong>la</strong>s fuerzas que<br />

por tanto tiempo los han tenido dominados.<br />

26 Hombres y pueblos han sucumbido bajo el po<strong>de</strong>r <strong>de</strong> esas influencias, sin que <strong>la</strong> Humanidad repare en ello.<br />

Enfermeda<strong>de</strong>s raras y <strong>de</strong>sconocidas que son producidas por el<strong>la</strong>s, han abatido a los hombres y han confundido a los<br />

científicos.<br />

27 ¡Cuánta discordia, cuánta confusión y dolor ha acumu<strong>la</strong>do el hombre sobre sí! La falta <strong>de</strong> oración, <strong>de</strong> moral y <strong>de</strong><br />

espiritualidad, ha atraído a los seres impuros y turbados, y ¿qué se pue<strong>de</strong> esperar <strong>de</strong> los que han partido sin luz y sin<br />

preparación?<br />

28 Ahí están aquéllos a quienes habéis engañado y oprimido, a los que habéis confundido y humil<strong>la</strong>do. Sólo confusión y<br />

tinieb<strong>la</strong>s os pue<strong>de</strong>n enviar, sólo venganzas pue<strong>de</strong>n ejercer y sólo rec<strong>la</strong>mos es lo que vienen a haceros.<br />

30 En el Segundo Tiempo, habiendo Jesús liberado a un poseído, los que miraban aquello <strong>de</strong>cían que Él tenía pacto con<br />

el espíritu <strong>de</strong>l mal; en cambio, el espíritu que atormentaba a aquel hombre me habló diciéndome: -¡Yo conozco quién<br />

eres: el Santo <strong>de</strong> Dios!<br />

31 Sin embargo, también había quienes, maravil<strong>la</strong>dos por esas obras, <strong>de</strong>cían: -¡Con qué autoridad y potencia manda a<br />

los seres inmundos y ellos le obe<strong>de</strong>cen!- No sabían que ese don está en todos, que esas armas todos <strong>la</strong>s lleváis. Más<br />

tar<strong>de</strong>, mis discípulos repitieron <strong>la</strong>s obras <strong>de</strong> su Maestro, <strong>de</strong>mostrando con ello que Jesús vino a enseñar a los hombres,<br />

que no sólo vino a mostrar su po<strong>de</strong>r, sino a reve<strong>la</strong>rle a <strong>la</strong> Humanidad los dones y <strong>la</strong> potestad que todos poseen.<br />

32 Orad, os dice el Maestro; <strong>la</strong> oración da lustre y brillo a <strong>la</strong>s armas <strong>de</strong> amor con que <strong>de</strong>béis conquistar <strong>la</strong> paz para <strong>la</strong><br />

Humanidad, hace que <strong>de</strong>spierten <strong>la</strong>s faculta<strong>de</strong>s, se sensibiliza el espíritu, <strong>la</strong> mirada se hace penetrante y el corazón<br />

sensitivo.<br />

33 Pueblo: Os he enseñado a libraros y a <strong>de</strong>fen<strong>de</strong>ros <strong>de</strong> <strong>la</strong>s asechanzas invisibles, a curaros <strong>de</strong> <strong>la</strong>s enfermeda<strong>de</strong>s<br />

extrañas y a libraros <strong>de</strong> <strong>la</strong>s ma<strong>la</strong>s influencias.<br />

Mas <strong>de</strong> cierto os digo que sólo <strong>la</strong> oración y <strong>la</strong> virtud os pue<strong>de</strong>n servir, como ya os lo he reve<strong>la</strong>do, para salir avante <strong>de</strong><br />

esas pruebas.<br />

134

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!