Lauros y palmas, de Amadeo Burdeos, sdb - Hispania Martyr

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Antiguos Alumnos, se meten por todas partes, Y nadie, jamás, ha podido observar la menor señal de tales armas. Ni las teníamos ni había motivo para tenerlas. Nuestras armas han sido siempre la caridad y el sacrificio. Con ellas hemos conquistado en todo tiempo y lugar las almas para Cristo, que es la única misión que la Providencia nos ha confiado. Para defendernos contábamos —con harta candidez por cierto, después de la experiencia de 1931— con la protección de las Autoridades; y sobre todo cpn nuestra actuación constante en pro de la juventud obrera a la que, especialmente, prodigamos nuestros desvelos. La leyenda de las armas de los conventos ha sido forjada, de consuno, por la malicia y el miedo. Vaya un botón de muestra. Era la noche del 11 de Mayo de 1931. Una inmensa muchedumbre rodeaba el edificio de nuestras Escuelas de Alicante, donde recibían educación gratuita unos ochocientos niños de las más humildes clases sociales. El miedo, azuzado por propagandas maliciosas, había hecho creer a las turbas engañadas, que en el Colegio se guardaba un verdadero arsenal de armas y que su conquista había de resultar una verdadera epopeya. Después que hubieron prendido fuego al salón-teatro y a la iglesia, echaron abajo, con una enorme viga a.manera de ariete, la puerta principal e irrumpieron en el edificio. En el primer rellano de la escalera esperaban a las turbas amotinadas los religiosos, armados... con el Santo Viático, que aquel santo — y luego mártir^- don Recaredo de los Ríos, les había administrado entre el crepitar de las llamas y el ensordecedor griterío de la turba enfurecida. Subían los primeros asaltantes arrimados a la pared, con el fusil echado a la cara, gritando y amenazando, para ahuyentar su miedo, que no se les pasó hasta que vieron a todos los Salesianos formando grupo alrededor de los niños, con los brazos cruzados sobre el pecho o las manos enlazadas con el santo Rosario. Tan sólo entonces, aquellos valientes se arrojaron como fieras sobre los indefensos religiosos, haciéndolos objeto de las más innobles befas y de los tratos más crueles. Al día siguiente un diario local jaleaba la valentía de aquellos héroes «que, a pecho descubierto, habían asaltado y conquistado el Convento-Fortaleza de los Salesianos» «Diario de Alicante», 12 de Mayo de 1931). ¿De dónde procedía la siniestra fama de «fortaleza» con que los atemorizaba nuestro colegio? Sencillamente: teníamos un cañoncito de juguete, de los llamados de fuegos japoneses. Los días festivos, para solaz de los centenares de niños que acudían al Oratorio, se solía atracar con caramelos y se disparaba aquel formidable «Bertha», que derramaba una lluvia de dulces y confites sobre la alegre turba infantil. En hechos semejantes o en fundamentos aún más ridículos se basaba, en muchos casos, la leyenda del armamento de los conventos. Lo que en realidad se buscaba era un pretexto cualquiera para disfrazar la calumnia, y cohonestar después la destrucción y ruina de aquellos edificios, seguida, no pocas veces, del martirio de sus inocentes moradores. Así fueron destruidas nuestras casas. Pero la Divina Providencia, que todo lo gobierna con miras a sus altos fines, ha hecho que, pasado el vendaval revolucionario, volvieran a resurgir de sus ruinas. No sólo: apenas disipado el humo de la tragedia, se han erigido nuevos colegios y nuevas escuelas, en donde, con renovado entusiasmo, los 15
hijos de San Juan Bosco continúan desempeñando su alta misión educadora. Ya durante la Cruzada, y en la zona Nacional, se abrieron los nuevos Colegios de Deusto, Azcoitia y Huesca (San Lorenzo). Y terminada la guerra, volvieron a actuar los antiguos, con penas y sacrificios, sí, pero con un florecimiento extraordinario. Y pese a las circunstancias económicas tan angustiosas de la post-guerra y a la escasez de personal motivada por el crecido martirologio de nuestra Inspectoría, se erigieron nuevas casas en Barcelona (Horta), Zaragoza, Valencia (Ruzafa) y Burriana, mientras están en curso de apertura otras varias (1). Es la bendición de Dios. Es la protección de nuestros Mártires. (1) Al publicar esta segunda edición nos cabe la satisfacción de completar el elenco de las huevas fundaciones con las siguientes: Arbós (Noviciado), Barcelona-Horta (Teologado de Martí-Codolar), Barcelona (Parroquia San Juan Bosco), Monzón, Huesca (Residencia), Pamplona (Huarte), Ripoll, La Álmunia de Doña Godina, Cabezo de Torres, Andorra de Teruel, Badalona, Reus... 16
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GERONA La Granja Agrícola de Geron
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LOS INTRUSOS Al día siguiente, 21,
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OTRAS COMUNIDADES Además de los gr
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LOS ESCONDIDOS Si dura y penosa fue
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El Arzobispo de Turín, Cardenal Fo
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Don PEDRO MESONERO, Clérigo triena
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Don ANTONIO BERTRÁN, Coadjutor Es
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Don FELIPE HERNÁNDEZ y don ZACARÍ
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LA CAPTURA El día siguiente, domin
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Don FÉLIX VIVET, estudiante de Teo
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PRIMERAS SALIDAS El día 24 de Juli
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nos, pesarosos de que se les escapa
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Interceded vosotros, santos sacerdo
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