Satto Vriteh - indice - Vaisnava

en algún momento de la vida se siente la necesidad de comenzar una
misión para servir al guru, entonces hay que hacerlo; la protección, la
inspiración y guía vendrán desde dentro, a fin de lograrlo. Pero si no
sientes que esto sea necesario, si piensas que puedes rendirte y animar
a otros incondicionalmente bajo el esquema establecido por un hermano
espiritual tuyo que es guru, entonces sigue adelante y ríndete y vuélvete
un devoto ejemplar. Pero bajo ninguna circunstancia caigas en kanaka,
kamini o pratishta, en el deseo de obtener dinero, mujeres y posición, en
nombre del bhakti. Porque la fama o la posición en nombre del bhakti no
te dará nada bueno, sólo te hará perder tu valiosa vida humana.
Krishna siempre nos ama, incluso si a veces nos jala las orejas
Srila Bhakti Raksak Sridhar Maharaja nos explicó que a veces no podemos
entender cómo nos llegan las bendiciones. Debemos estar muy atentos y
cada vez que algo negativo surje de nuestro interior debemos estarlo
incluso más. A este respecto él nos contó la historia de un joven bengalí
que era un gran poeta. Era tan talentoso que fue escogido por el gobierno
de la India para que representara a su país en Italia, en una convención
de poesía; él fue y obtuvo el primer lugar. Cuando regresó a Bengala se
sentía muy orgulloso, pero tenía un gran problema, su padre, que siempre
le decía: “Tú eres sólo un tonto, un ignorante, eres solo un niño sin mayor
experiencia”. El joven estaba muy infeliz por esto, él pensaba: “A donde
sea que voy las personas me respetan y aprecian mi talento, pero mi padre
es mi enemigo, él siempre me está criticando, no puedo tolerar esto más”.
Así pensando, un día decidió matar a su padre. En la noche se escondió en
el armario con un cuchillo, decidido a matarlo cuando se quedara dormido.
Cuando su padre se acostó, su esposa entró al cuarto, y contemplando la
luna le dijo: “Oh, mira querido esposo, la luna llena está tan hermosa”.
A lo que él le dijo: “La luna llena no es nada comparada con el brillo del
rostro de nuestro amado hijo”. La madre le dijo: “Sí, él es muy bello,
pero tú siempre lo retas y eso a él lo entristece mucho”. El padre entonces
le dijo: “Sólo lo hago porque lo amo mucho, no quiero que se vuelva
arrogante y que eche a perder su vida, al convertirse en alguien engreído
y orgulloso que no acepta consejos”. El hijo, al escuchar la conversación
y arrepenttido por lo que había pensado hacer, salió del closet y se postró