Satto Vriteh - indice - Vaisnava

consideración a todos sus discípulos. Fue extremadamente sensible
respecto a que cada uno estuviese feliz en su familia espiritual. Pero también
esto ha sido malentendido pues tampoco él quería que algún discípulo se
enriqueciera a costa del esfuerzo de sus hermanos espirituales. Quienquiera
que necesitara algún ingreso que superara los gastos básicos, era animado
por Srila Prabhupada para que saliera y ganara ese dinero adicional en
forma honesta, y así podrían dedicar su tiempo libre a la publicación de
libros o a la administración de su comunidad. Bajo ninguna circunstancia
Srila Prabhupada quería devotos que vivieran a costa de donaciones dadas
al templo; él condenó el vivir de las Deidades, como es la costumbre en
algunos templos Goswamis de Vrindavan, como así también condenó el
vivir de la enseñanza del Bhagavatam. Srila Prabhupada quería que la
pureza fuera el centro de su misión, él sabía que sin ella las cosas no
progresarían en el futuro, fue por eso que enfatizó mucho este aspecto.
Otra vez Hippies si ustedes no predican
Srila Prabhupada quiso que todos sus devotos participaran en la
prédica. Hay una historia a este respecto que es muy conmovedora. En
una oportunidad los devotos estaban congregados alrededor de Srila
Prabhupada y de pronto uno de ellos hizo una pregunta: “Srila Prabhupada,
¿qué pasará con nosotros después que usted nos deje?” Un silencio total
se adueñó del cuarto después de esta pregunta. Se podría haber escuchado
la caída de una aguja. Todos miraron atentos a Srila Prabhupada, con gran
ansiedad, esperando su respuesta. Hasta que de un modo muy inesperado
dijo: “Ustedes…. -e hizo un pequeño alto-, ¡ustedes volverán a ser hippies
otra vez!”. ¿Pueden imaginar cómo se estremecieron sus corazones al
escuchar esto? ¿Seremos hippies otra vez? ¡Qué desastre! Pero luego
Srila Prabhupada levantó su voz y prácticamente agregó diciendo: “…si
ustedes no siguen predicando por el resto de sus vidas!” Al oír esto, los
corazones de los devotos se volvieron a reanimar.
Este ejemplo muy sencillo nos habla del humor de Srila Prabhupada.
Él se mantuvo comprometido con todos nosotros en la prédica: madres
solteras, sannyasis, grihastas, brahmacaris... Él quería que estudiáramos