Satto Vriteh - indice - Vaisnava
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de una misión u otra; uno solo puede analizar la vida de una persona<br />
cuando ésta explícitamente lo pide, esperando el refugio de nuestras<br />
instrucciones, de lo contrario uno caerá en la categoría de perturbador y<br />
crítico, con lo que uno además causa un disturbio a su propia mente.<br />
La crítica no es útil para el avance espiritual<br />
De hecho, cuando Srila Prabhupada dejó este mundo hubieron muchas<br />
quejas y sentimientos de inconformidad, y así, muchos lugares dominados<br />
por la crítica a los vaisnavas se volvieron inútiles para el avance espiritual.<br />
Es común que con la partida del maestro espiritual venga el caos, y se<br />
genere una situación de inestabilidad y dolor.<br />
¿Quién causa las dificultades y quién las puede resolver?<br />
Tenemos que aprender del pasado y no hay razón para quedar resentido.<br />
Quiero contarles una historia que me enseñó algo muy particular. Después<br />
de ya haber comenzado mi propia misión vaisnava llamada Vrinda, en el<br />
servicio a Srila Prabhupada, acostumbraba ir cada año al Krishna Balaram<br />
mandir en Vrindavan para el día de la desaparición de Srila Prabhupada.<br />
En esa ocasión, en 1986, fui al mangal artik, y estaban varios de mis<br />
hermanos espirituales y gurus de Iskcon presentes. Ellos bailaban durante<br />
el artik y había una gran congregación de devotos. Como tenía a la vista a<br />
algunos de los devotos con quienes había estado sirviendo previamente y<br />
a otros a quienes apenas conocía, me preguntaba quién era el responsable<br />
de las dificultades en la misión de Srila Prabhupada después de su partida.<br />
¿A quién se podría culpar por las cosas que pasaron? Mis ojos pasaron<br />
de un devoto a otro mientras recordaba algunas cosas que habían hecho.<br />
Pero, al mismo tiempo, no podía encontrar a nadie a quien realmente<br />
pudiera culpar como persona individual por los problemas que habían<br />
pasado y que aún se estaban viviendo. Los maestros espirituales dejaban<br />
sus servicios y discípulos, los templos que Srila Prabhupada mismo había<br />
comprado estaban siendo vendidos y pasaban un sin número de otros<br />
problemas, algunos menores y otros mayores.