Satto Vriteh - indice - Vaisnava

arrestar a su guru fueron donde él y le dijeron: “Gurudeva, váyase por
favor, han venido a arrestarlo”. Pero Narottam Das Thakur les dijo: “No.
Que sea lo que Krishna determine, yo seguiré predicando la Verdad, y
sólo dependeré de eso”. Los discípulos estaban desesperados al ver que
su guru pasaba por este problema.
A la mañana siguiente, en frente del ghat en donde los botes llegaban,
Ganga-narayan Cakravarti, un discípulo del gran maestro, armó una tienda
como si fuera un vendedor, y otro devoto se sentó junto a él haciendo
el papel de un alfarero. Cuando los brahmanas se acercaron con el rey
y los guardias se encontraron con el “vendedor” recitando slokas en el
sánscrito más refinado. Uno de los brahmanas que acompañaba al rey
le preguntó: ¿Sabe usted dónde se encuentra Narottama Das Thakur?,
usted es una persona culta, debe conocerlo”. Él respondió: “No, yo no
sé gran cosa, sólo me limito a recitar los slokas que mi gurudeva me ha
recomendado. La verdad es que no sé donde está él en este momento,
pero si quieres algo de él puedes decirme y yo le haré llegar tu mensaje”.
Los brahmanas se pusieron nerviosos al ver a este vendedor tan culto.
Entonces le hicieron algunas preguntas de las escrituras y él de inmediato
las contestó de forma muy refinada, pero luego les dijo: “Ustedes son
todos muy cultos y yo tan ignorante, pero mi amigo el alfarero que está
aquí, es mucho más preparado que yo”. Entonces, dirigiéndose a él, le
dijo: “Por favor, ayuda a estos brahmanas”. El devoto que se hacía pasar
por alfarero se acercó y les expuso su gran sabiduría. Los brahmanas y
el rey estaban muy sorprendidos con ellos y les preguntaron: “Dígannos,
¿quién les ha enseñado este gran conocimiento védico?” “Nuestro
gurudeva –respondieron ellos – Srila Narottama das Thakur, él ha sido
muy generoso al darnos este saber”. Los brahmanas se pusieron muy
nerviosos y el rey los miró y les preguntó, “¿Cómo dicen ustedes que él
está iniciando a personas sin cualificaciones y que está perturbando a la
sociedad védica?” Los brahmanas se disculparon ante el rey y le pidieron
que se regresara, pero él pudo entender que ellos sentían envidia y les
dijo: “Ustedes pueden irse a sus casas, yo tengo que encontrar a este
guru”. Entonces fue donde Narottama das Thakur guiado por estos dos
devotos y se rindió a él convirtiéndose en su discípulo.