Espacios y actividades costeras en Michoacán - Biblioteca CICESE

ESPACIOS Y ACTIVIDADES COSTERAS EN MICHOACÁN. APROXIMACIONES VARIAS
los empleados administrativos, y otro para el personal especializado de la empresa
constructora (ICA). Mejor construidas que las de El Infiernillo, estas instalaciones tampoco
se vincularon con las necesidades de las poblaciones locales, pues fueron diseñadas
para satisfacer estrictamente los requerimientos de la mano de obra directamente
ligada a las exigencias productivas y casi siempre se mantuvieron aisladas del resto
de la población local. La segregación social que estas obras producen se manifestó
claramente. La mayoría de la población local no podía tener acceso a ellas por su falta
de empleos y de ingresos fijos. Las derramas del circulante monetario durante la
construcción no se utilizaron para capitalizar la región ni consolidaron las actividades
productivas debido a su carácter transitorio. Lo que es peor: diversas obras, como
las de riego, concebidas para habilitar 18 000 ha de tierras ejidales de los municipios
de Lázaro Cárdenas y La Unión, sólo fueron utilizadas parcialmente (no más de
6 000 ha) y se destinaron predominantemente al cultivo de frutales.
Para tener una idea de la magnitud de estos desequilibrios en el delta, hay que
considerar que su porción subaérea está integrada por extensas llanuras de inundación,
canales y niveles naturales del río; por abundantes meandros abandonados, abanicos
aluviales, islas, lagunas, esteros (entre los que sobresalen Barra del Trigre, El Pichi,
Mata de Carrizo, Santa Ana, Burras, El Gasolino, Boca Vieja y Petacalco); amplias zonas
de manglares, varios ríos y una multitud de arroyos de pequeñas dimensiones.
Estas condiciones convertían al delta en una área fértil y altamente productiva. Las
mejores tierras de aluvión, esteros y pantanos, ubicadas en las islas centrales y en una
amplia extensión de la planicie costera de Lázaro Cárdenas, producían una notable
riqueza agrícola y pesquera que satisfacía con suficiencia las necesidades de los escasos
habitantes de la región; no es extraño, por ello, encontrar testimonios como los de
aquellos viajeros que la visitaron en el siglo XIX, como Roberto B. Gorsuch, que relata
con asombro:
Santiago Zacatula está situado a los 17° 58’ 48” lat. N y (según el Barón de Humboldt) a 3° 30’ 10”
long. O del meridiano de México. Se cree que por su clima y por haber sido un presidio en la guerra
de independencia, es un país melancólico e inhabitable; mas nada de esto tiene: las islas que
forman los dos brazos del río [Balsas] es una continuada huerta de muchos cocales, de cayaco o
coco de aceite y todas las frutas tropicales que produce de una manera gigantesca. Tanto en la isla
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