Espacios y actividades costeras en Michoacán - Biblioteca CICESE
Espacios y actividades costeras en Michoacán - Biblioteca CICESE
Espacios y actividades costeras en Michoacán - Biblioteca CICESE
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
ESPACIOS Y ACTIVIDADES COSTERAS EN MICHOACÁN. APROXIMACIONES VARIAS<br />
Por estas razones la situación del río Balsas nos confronta, querámoslo o no, con<br />
situaciones límite <strong>en</strong> términos de nuestro destino como sociedad. Nos obliga a interrogarnos<br />
y a respondernos sobre la legitimidad de las razones que nos han llevado a<br />
situaciones irreversibles, como son la anulación de las funciones ecológicas críticas<br />
de nuestros más importantes sistemas fluviales, de cuyos bi<strong>en</strong>es y servicios ambi<strong>en</strong>tales<br />
no podremos prescindir <strong>en</strong> nuestros planes futuros si realm<strong>en</strong>te queremos afrontar<br />
exitosam<strong>en</strong>te los difíciles retos que nos plantea la sost<strong>en</strong>ibilidad de nuestra sociedad.<br />
El caso del río Balsas es ejemplar porque no se trata de un río cualquiera. Es la cu<strong>en</strong>ca<br />
hidrológica más importante de la verti<strong>en</strong>te del Pacífico mexicano. Debemos <strong>en</strong>tonces<br />
responder con claridad a la cuestión de si podremos sobrevivir y construir una sociedad<br />
sust<strong>en</strong>table destruy<strong>en</strong>do, como ya lo hemos hecho, una parte vital de nuestro<br />
patrimonio ecológico.<br />
La otra gran cuestión que nos plantea el caso del río Balsas es el hecho incontrovertible<br />
de que, hasta hoy, los b<strong>en</strong>eficios, los costos y los riesgos ecológicos de nuestros<br />
megaproyectos modernizadores se han transferido de un modo desigual <strong>en</strong>tre los difer<strong>en</strong>tes<br />
sectores de nuestra sociedad. De un modo sistemático, los costos y los altos<br />
riesgos se han cargado sobre las sociedades locales y regionales. Ahí la degradación<br />
de los recursos, las desigualdades sociales y la calidad de la vida alcanzan niveles insost<strong>en</strong>ibles.<br />
Y, de nuevo, el caso del delta del río Balsas es un ejemplo típico de estas<br />
“inversiones para la desigualdad”, como justam<strong>en</strong>te las han llamado algunos estudiosos<br />
de nuestra realidad social. Esto no debe ni puede continuar así.<br />
La economía del delta, <strong>en</strong> efecto, pres<strong>en</strong>ta actualm<strong>en</strong>te una considerable cantidad<br />
de desequilibrios ecológicos y económicos. En ella coexist<strong>en</strong> los complejos portuarioindustriales<br />
y <strong>actividades</strong> agropecuarias preindustriales; industrias estratégicas junto<br />
a <strong>actividades</strong> de autoconsumo; los megaproyectos portuario-industriales más sofisticados<br />
y áreas rurales (agrícolas y pesqueras) altam<strong>en</strong>te deterioradas; el más elevado nivel<br />
tecnológico industrial junto a <strong>actividades</strong> tradicionales; los más altos niveles de ingreso<br />
junto al desempleo y el subempleo.<br />
Este mosaico de contradicciones expresa el costo ecológico y social de un modelo<br />
de crecimi<strong>en</strong>to económico insost<strong>en</strong>ible.<br />
La forma <strong>en</strong> la que se construyó el complejo portuario-industrial produjo serios<br />
desequilibrios estructurales <strong>en</strong> la economía y la sociedad regionales:<br />
94