estudio de posibilidades y viabilidad de actividades ... - Coag

PROYECTO PILOTO
RED RURAL NACIONAL
Producción integrada
y ecológica
La producción agraria ecológica es el sistema
de producción y elaboración de
productos agroalimentarios de elevada
calidad con técnicas que excluyen el uso
de elementos químicos de síntesis (fertilizantes,
fitosanitarios, etc.), con el objetivo
de preservar el medio ambiente, mantener
la fertilidad del suelo y proporcionar alimentos
con todas las propiedades naturales.
Paralelamente a la producción agraria
ecológica, se desarrolla la producción
integrada. Se trata, en ambos casos, de la
aplicación de técnicas respetuosas con el
medio ambiente a la producción agraria
estándar o convencional.
El Consell Balear de la Producció Agrària
Ecològica (CBPAE), creado en 1994, es el
organismo encargado de la regulación, el
control, la certificación y la promoción de
la producción agraria ecológica de las Illes
Balears.
La producción agraria ecológica es una actividad
en fuerte expansión en el conjunto
de las Illes Balears en la actualidad, igual
que en el resto de Europa, que se presenta
como una alternativa de futuro sólida
para la producción agraria estándar, y de
gran potencial en el mercado interior. Las
políticas de diferenciación de la producción
(productos ligeros, de gran calidad
y elevado valor añadido por unidad) son
los más deseables para una región aislada,
fragmentada y de escasa extensión y, consecuentemente,
con grandes dificultades
estructurales en los canales de producción
y comercialización.
En la actualidad, destacan los cultivos
ecológicos de pasturas y forraje (36,6%),
bosques y recolección silvestre (34,2%),
frutos secos (13,8%) y cereales y leguminosas
(10,7%). Los cultivos de hortalizas y
frutales continúan, pues, siendo minoritarios,
pese al aumento de la demanda. Por
104
islas, la superficie destinada a agricultura
ecológica supone en Mallorca y en Menorca
entorno del 3,6% de la superficie total,
mientras que en Eivissa y Formentera tan
sólo representa el 0,6%. Si se considera la
SAU, en Menorca la superficie destinada a
agricultura ecológica representa el 6,2%,
mientras que en Mallorca es del 5,6% y en
las islas Pitiüsas de tan sólo del 1,4%.
Respecto a la orientación productiva de
la ganadería ecológica, en 2005 el 37,4%
centran la actividad en el ovino de carne,
el 24,6% en la avicultura para la obtención
de huevos y el 16,4% en el porcino.
De igual manera que con la ganadería
convencional, Menorca presenta una clara
especialización en la producción ecológica
de bovino (con una doble lectura: 11
de las 29 explotaciones ecológicas de la
isla son de bovino y 11 de las 17 explotaciones
ecológicas de bovino del conjunto
de las Illes Balears se encuentran localizadas
en Menorca). Por otro lado, el 65,7%
de las cabezas de ganado ecológico son
de ovino, de manera mayoritaria de carne,
y el 25,9% de aves. Cabe destacar la casi
nula presencia de cualquier tipo de ganado
en las islas Pitiüsas, con la excepción
de la avicultura.
Insularidad
El hecho geográfico de la insularidad afecta
al sector agrícola y ganadero del archipiélago
balear, como afecta al carácter de
sus habitantes. Los elementos de sobrecoste
de la insularidad respecto a otras
regiones son, según El coste de la insularidad
en el sector agrario balear (Conselleria
d’Agricultura i Pesca y UIB, 2006):
producción
actividad
A los que se suman los sobrecostes generados
por la demanda:
maño reducido
el exterior
De lo que, en consecuencia, puede extraerse
como afecciones estructurales:
externa de los medios de producción o
inputs y, por tanto, sobrecoste económico
derivado del transporte, de manera
importante en mercancías pesadas o
voluminosas, por lo que el efecto es mayor
en el sector agrario. Específicamente
en el sector agrario: gasoil, energía eléctrica,
semillas, fertilizantes, maquinaria,
piensos, tratamientos fitosanitarios, tratamientos
zoosanitarios, etc.
te para la economía que presenta una
estructura más débil, como la insular.
Por tanto, acusada especialización productiva
en actividades económicas con
poca dependencia de inputs o outputs
pesados o voluminosos: turismo, sector
financiero e industrias ligeras (zapatos y
bisutería), entre otros.
ción por el sobrecoste del transporte de
los inputs y, por tanto, elevado precio de
los productos resultantes, no competitivos
con los productos procedentes de los
mercados exteriores.
productos autóctonos, por la reducida
dimensión de los mercados interiores y
la existencia de productos exteriores más
baratos.