10.07.2015 Views

Liberarte_Vol_3_No_1_Septiembre_Diciembre_2008

Liberarte_Vol_3_No_1_Septiembre_Diciembre_2008

Liberarte_Vol_3_No_1_Septiembre_Diciembre_2008

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

Andrew Quitmeyer se pregunta si es posible abordar estos textos desde la plataformahermenéutica de la alegoría. De hecho, los relatos son tan ricos y variados, tan frescos y distintos,que el reflejo de quienes entran en contacto con ellos se dirige hacia la posibilidad de verlos comoindicios de algo más.La tendencia a ver en la expresión artística juvenil un realismo insuficiente con frecuencia semanifiesta en lecturas paternalistas. El recurso a la alegoría intenta eludir la trampa de unainterpretación autosuficiente. El hecho es que la alegoría considera las complejidades y losdesajustes en que incurre todo ejercicio de este tipo. La palabra deriva del griego allos +agoreuein, ―el otro + expresar‖ y de hecho estos textos hablan, o expresan, o indican, al otro:niño/a, trabajador/a. Aunque la alegoría consiste, también en hallar, bajo el velo ornamental de sudiscurso, los rastros de un significado adicional. La alegoría es así tanto decoración como decoro,el placer de la ornamentación y el recato de la prudencia. La alegoría expresa la interrelación queexiste entre mundos pequeños y grandes.El hecho es que nos vemos en la presente instancia, ante la dificultad de pronunciarnos sobre unmodo discursivo emergente: literario hasta cierto grado, pero insuflado de intensidades expresivasdistintas: la ilustración, la animación, la incorporación sobretodo, del/la autor/a, a nivel físico, dentrodel relato visual. Se trata así de un registro bio-gráfico, derivado de los llamados géneros de larealidad, que se inserta con comodidad, en el plano imaginativo. Son niños que se escriben, sepintan, se citan, se ilustran, se decoran y se muestran.El impulso del proyecto del Rincón del Relato fue, desde el inicio, generar una dinámica y unaproducción centrada en el sujeto. La idea fue/era, facilitar las historias de los mismos protagonistasy contribuir a su generación. De esa forma, aunque las intervenciones editoriales existan, el relatose construye abiertamente en cooperación con los deseos de los actores (literalmente). <strong>No</strong>queríamos conocer de las vidas de estos jóvenes sino lo que ellos nos querían mostrar y lo quequerían comunicar, en todos los casos, pasaba por la ilustración de su rica vida interior.Todo esto nos regresa al problema de la interpretación, o del aprendizaje de nuevas formas delectura en las que la alegoría juega un papel crítico. <strong>No</strong> queremos doblegar estos textos a lospatrones hermenéuticos de una textualidad discreta y no cooperativa, queremos generar otras víasde ingreso. El problema histórico de la literatura juvenil consiste en el trastrocamiento de clavesexpresivas juveniles por las del mundo adulto, a nombre de la corrección gramatical o el decoroestético.Creemos que no hay razón alguna para suponer que estos relatos deban dejar a un lado su pasiónpor decorarse ni para creer que nuestros hábitos de lectura deban dejar a un lado el decoro,aunque aspiramos a una clave de acercamiento a estos textos (y a muchos otros por venir) que

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!