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El Conflicto de los Siglos por Elena de White

Se recrudece una guerra espiritual. Embatallados en El Conflicto de los Siglos, desde la eternidad pasada hasta los tiempos actuales, se están luchando dos fuerzas una contra el otra por la soberanía universal. Este libro se explica cómo inició la guerra, cómo llegará el punto culminante y cómo se terminará. Con desarrollos muy chocantes que pican la mente y despiertan las ascuas del alma, también la obra ilumina la visión y da revelación acerca de la manipulación espiritual, la política mundial, los regímenes represivos, los movimientos religiosos, los derechos y las libertades amenazados y la decodificación del misterio de la profecía.

Se recrudece una guerra espiritual. Embatallados en El Conflicto de los Siglos, desde la eternidad pasada hasta los tiempos actuales, se están luchando dos fuerzas una contra el otra por la soberanía universal. Este libro se explica cómo inició la guerra, cómo llegará el punto culminante y cómo se terminará. Con desarrollos muy chocantes que pican la mente y despiertan las ascuas del alma, también la obra ilumina la visión y da revelación acerca de la manipulación espiritual, la política mundial, los regímenes represivos, los movimientos religiosos, los derechos y las libertades amenazados y la decodificación del misterio de la profecía.

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<strong>El</strong> <strong>Conflicto</strong> <strong>de</strong> <strong>los</strong> Sig<strong>los</strong><br />

Capítulo 34 : <strong>El</strong> Misterio <strong>de</strong> la Inmortalidad<br />

DESDE <strong>los</strong> tiempos más remotos <strong>de</strong> la historia <strong>de</strong>l hombre, Satanás se esforzó <strong>por</strong> engañar a<br />

nuestra raza. <strong>El</strong> que había promovido la rebelión en el cielo <strong>de</strong>seaba inducir a <strong>los</strong> habitantes <strong>de</strong> la tierra<br />

a que se uniesen con él en su lucha contra el gobierno <strong>de</strong> Dios. Adán y Eva habían sido perfectamente<br />

felices mientras obe<strong>de</strong>cieron a la ley <strong>de</strong> Dios, y esto constituía un testimonio permanente contra el aserto<br />

que Satanás había hecho en el cielo, <strong>de</strong> que la ley <strong>de</strong> Dios era un instrumento <strong>de</strong> opresión y contraria al<br />

bien <strong>de</strong> sus criaturas. A<strong>de</strong>más, la envidia <strong>de</strong> Satanás se <strong>de</strong>spertó al ver la hermosísima morada preparada<br />

para la inocente pareja. Resolvió hacer caer a ésta para que, una vez separada <strong>de</strong> Dios y arrastrada bajo<br />

su propio po<strong>de</strong>r, pudiese él apo<strong>de</strong>rarse <strong>de</strong> la tierra y establecer allí su reino en oposición al Altísimo.<br />

Si Satanás se hubiese presentado en su verda<strong>de</strong>ro carácter, habría sido rechazado en el acto, pues<br />

Adán y Eva habían sido prevenidos contra este enemigo peligroso; pero Satanás trabajó en la obscuridad,<br />

encubriendo su propósito a fin <strong>de</strong> po<strong>de</strong>r realizar mejor sus fines. Valiéndose <strong>de</strong> la serpiente, que era<br />

entonces un ser <strong>de</strong> fascinadora apariencia, se dirigió a Eva, diciéndole: "¿Conque Dios os ha dicho: no<br />

comáis <strong>de</strong> todo árbol <strong>de</strong>l huerto?" (Génesis 3:1.) Si Eva hubiese rehusado entrar en discusión con el<br />

tentador, se habría salvado; pero ella se aventuró a alegar con él y entonces fue víctima <strong>de</strong> sus artificios.<br />

Así es como muchas personas son aún vencidas.<br />

Dudan y discuten respecto a la voluntad <strong>de</strong> Dios, y en lugar <strong>de</strong> obe<strong>de</strong>cer sus mandamientos,<br />

aceptan teorías humanas que no sirven más que para encubrir <strong>los</strong> engaños <strong>de</strong> Satanás. "Y respondió la<br />

mujer a la serpiente: Del fruto <strong>de</strong> <strong>los</strong> árboles <strong>de</strong>l jardín bien po<strong>de</strong>mos comer: mas <strong>de</strong>l fruto <strong>de</strong>l árbol que<br />

está en medio <strong>de</strong>l jardín, ha dicho Dios: No comeréis <strong>de</strong> él, ni lo tocaréis, no sea que muráis. Entonces<br />

dijo la serpiente a la mujer: De seguro que no moriréis; antes bien, sabe Dios que en el día que comiereis<br />

<strong>de</strong> él, vuestros ojos serán abiertos, y seréis como Dios, conocedores <strong>de</strong>l bien y <strong>de</strong>l mal." (Vers. 2-5, V.M.)<br />

La serpiente <strong>de</strong>claró que se volverían como Dios, que tendrían más sabiduría que antes y que serían<br />

capaces <strong>de</strong> entrar en un estado superior <strong>de</strong> existencia. Eva cedió a la tentación, y <strong>por</strong> influjo suyo Adán<br />

fue inducido a pecar. Ambos aceptaron la <strong>de</strong>claración <strong>de</strong> la serpiente <strong>de</strong> que Dios no había querido <strong>de</strong>cir<br />

lo que había dicho; <strong>de</strong>sconfiaron <strong>de</strong> su Creador y se imaginaron que les estaba cortando la libertad y que<br />

podían ganar gran caudal <strong>de</strong> sabiduría y mayor elevación quebrantando su ley.<br />

Pero ¿cómo comprendió Adán, <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> su pecado, el sentido <strong>de</strong> las siguientes palabras: "En el<br />

día que comieres <strong>de</strong> él <strong>de</strong> seguro morirás"? ¿Comprendió que significaban lo que Satanás le había<br />

inducido a creer, que iba a ascen<strong>de</strong>r a un grado más alto <strong>de</strong> existencia? De haber sido así, habría salido<br />

ganando con la transgresión, y Satanás habría resultado en bienhechor <strong>de</strong> la raza. Pero Adán comprobó<br />

que no era tal el sentido <strong>de</strong> la <strong>de</strong>claración divina. Dios sentenció al hombre, en castigo <strong>por</strong> su pecado, a<br />

volver a la tierra <strong>de</strong> don<strong>de</strong> había sido tomado: "Polvo eres, y al polvo serás tornado." (Vers. 19.) Las<br />

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