07.05.2013 Views

la era del diamante.pdf

la era del diamante.pdf

la era del diamante.pdf

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

le entregó un rollo al magistrado. El juez examinó el<br />

sello; llevaba <strong>la</strong> marca <strong>del</strong> Doctor X.<br />

Lo llevó a <strong>la</strong> oficina y lo desenrolló sobre <strong>la</strong><br />

mesa. Era genuino, escrito en papel de arroz con tinta<br />

de verdad, no una cosa mediatrónica.<br />

Se le ocurrió al juez, incluso antes de haber<br />

leído siqui<strong>era</strong> aquel documento, que se lo podría<br />

llevar a un marchante de arte en Nanjing Road y<br />

venderlo por el sueldo de un año. El Doctor X,<br />

dando por supuesto que fuese realmente él quien<br />

había dibujado aquellos caracteres, <strong>era</strong> el calígrafo<br />

vivo más impresionante que el juez Fang había visto<br />

nunca. Su trazo de<strong>la</strong>taba una rigurosa base<br />

confuciana, muchas más décadas de estudio de <strong>la</strong>s<br />

que el juez Fang podía pretender, pero sobre esa base<br />

el doctor había desarrol<strong>la</strong>do un estilo definido, muy<br />

expresivo sin ser desaliñado.<br />

Era <strong>la</strong> mano de un anciano que entendía <strong>la</strong><br />

importancia de <strong>la</strong> gravedad sobre todo lo demás, y<br />

que, habiendo establecido su dignidad, transmitía <strong>la</strong><br />

mayor parte <strong>del</strong> mensaje por medio de matices. Más<br />

allá de eso, <strong>la</strong> estructura de <strong>la</strong> inscripción <strong>era</strong><br />

exactamente <strong>la</strong> correcta, un equilibrio perfecto entre

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!