08.05.2013 Views

Te presto mi Stradivarius, de Gloria Gitaroff

Te presto mi Stradivarius, de Gloria Gitaroff

Te presto mi Stradivarius, de Gloria Gitaroff

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

<strong>Te</strong> <strong>presto</strong> <strong>mi</strong> <strong>Stradivarius</strong><br />

24.<br />

Cada vez que sentía que me estaba reacomodando y <strong>mi</strong>s cosas se<br />

iban poniendo <strong>de</strong>spacito en su lugar, pasaba algo que, como una ráfaga,<br />

<strong>de</strong>sparramaba todo otra vez. Y a volver a empezar.<br />

Julián, el diseñador con cara <strong>de</strong> hermano bueno, tenía la culpa esta<br />

vez. Había estado hablando con él esa mañana y casi sin darme cuenta,<br />

qué cara <strong>de</strong> hermano bueno que tenía, ter<strong>mi</strong>né contándole que me<br />

había separado. Yo lo había ocultado en la agencia y por primera vez<br />

lo pu<strong>de</strong> <strong>de</strong>cir sin sentirme molesta, como en falta.<br />

Con cara <strong>de</strong> experto, me dijo que él sabía <strong>de</strong> esas cosas, y que seguro<br />

que Fernando iba a volver. Con cara <strong>de</strong> experto también, me dijo que no<br />

estaba tan seguro <strong>de</strong> que, llegado ese momento, yo lo fuera a aceptar.<br />

Me encontré sacudiendo con fuerza la cabeza, como si hubiese tenido<br />

<strong>mi</strong>edo <strong>de</strong> que, por <strong>de</strong>cirlo nada más, se convirtiese en realidad.<br />

–Claro, flaquita, vos <strong>de</strong>cís que no, pero <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> un tiempo…<br />

<strong>Te</strong> están pasando cosas lindas, sos una tipa fenómena, no va a tardar<br />

en aparecer alguien que te sepa querer…<br />

No se me había ocurrido pensar en otro que no fuera Fernando.<br />

Yo lo querría a él eternamente, tal como me lo había propuesto a mí<br />

<strong>mi</strong>sma el día que lo conocí. Los príncipes azules no podían ser sino<br />

para toda la vida.<br />

79

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!