EL QUIJOTE - Universidad de Castilla-La Mancha
EL QUIJOTE - Universidad de Castilla-La Mancha
EL QUIJOTE - Universidad de Castilla-La Mancha
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
LOS CLÁSICOS EN LA ENSEÑANZA D<strong>EL</strong> ESPAÑOL<br />
profesores sabrán encontrar, si no han encontrado ya, la vía más<br />
aconsejable <strong>de</strong> acceso, ya sea por medio <strong>de</strong> lecturas individualizadas <strong>de</strong><br />
capítulos puestas en común durante la clase, ya por medio <strong>de</strong> la lectura <strong>de</strong><br />
partes o bloques <strong>de</strong> capítulos que tengan sentido, o <strong>de</strong> la lectura completa<br />
<strong>de</strong> una <strong>de</strong> las dos partes <strong>de</strong>l Quijote, si n es posible el texto completo,<br />
aunque seguramente algún alumno hará la lectura completa, animado por<br />
sus profesores.<br />
Y es que, aparte otras razones, los «requilitorios gramaticales»,<br />
imprescindibles para el aprendizaje <strong>de</strong> la propia lengua y <strong>de</strong> otras, por<br />
supuesto, se sustentan, en mayor o menor medida, en una teoría lingüística<br />
que, por <strong>de</strong>cirlo con palabras <strong>de</strong> Chomsky, se refiere:<br />
A un hablante/oyente i<strong>de</strong>al en una comunidad lingüística totalmente homogénea, un<br />
hablante que conoce completamente su lengua y no está afectado por condiciones<br />
gramaticalmente irrelevantes, como limitaciones <strong>de</strong> la memoria, distracciones, cambios<br />
en la atención o en el interés, o <strong>de</strong>fectos casuales o característicos, a la hora <strong>de</strong> aplicar<br />
sus conocimientos <strong>de</strong> la lengua a un uso real Chomsky [1965:3].<br />
Sin embargo, tal y como comenta José Antonio Marina, las<br />
pretensiones teóricas <strong>de</strong> la gramática pura e inmaculada, insoslayables<br />
para su aspiración <strong>de</strong> convertirse en una ciencia objetiva, implican una<br />
abstracción ajena al uso habitual <strong>de</strong>l idioma:<br />
¡Quién pudiera ser ese hablante/oyente i<strong>de</strong>al! Por <strong>de</strong>sgracia, los<br />
hablantes reales, los interlocutores reales, los que hacemos el lenguaje<br />
somos seres limitados, aunque tengamos sueños <strong>de</strong> gran<strong>de</strong>za.<br />
Empantanados en malentendidos, pero empeñados en enten<strong>de</strong>rnos. <strong>La</strong>s<br />
dos cosas al tiempo. Y esa dualidad, dolorosa y magnífica, <strong>de</strong>be contar en<br />
el momento <strong>de</strong> estudiar una creación humana que nos <strong>de</strong>lata tan<br />
crudamente como el lenguaje.<br />
Necesitamos una teoría humanística <strong>de</strong>l lenguaje, enredada, dramática,<br />
heroica, arrepentida, <strong>de</strong>smesurada, ética, porque así captaremos el sentido<br />
<strong>de</strong> esa maravillosa, brillante, conmovedora, exaltante invención [Marina,<br />
1998:16].<br />
<strong>La</strong> literatura no ha hecho explícita, claro está, esa teoría humanística<br />
que pi<strong>de</strong> Marina, pero sí la contiene implícita, en cierta manera al menos; e<br />
incluso ofrece, aunque sólo sea ocasionalmente, magníficas lecciones<br />
explícitas <strong>de</strong> ella. Leamos, para comprobarlo, un poema <strong>de</strong> Bene<strong>de</strong>tti:<br />
Sabemos que el alma como principio <strong>de</strong> la vida<br />
es una caduca concepción religiosa e i<strong>de</strong>alista<br />
pero que en cambio tiene vigencia en su acepción segunda<br />
o sea hueco <strong>de</strong>l cañón <strong>de</strong> las armas <strong>de</strong> fuego<br />
113