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BMW i3<br />
en ORBYT.es<br />
En este vídeo podrás ver las claves de esta la prueba que hemos realizado<br />
al nuevo BMW i3.<br />
La pega<br />
El hecho de que el coche carezca de pilar central hace que el<br />
acceso al interior sea más fácil pero esto significa que no se<br />
puede abrir las puertas traseras si no se abren antes las<br />
delanteras Por otro lado la recarga al 100% de las baterías en<br />
un enchufe convencional es demasiado lenta<br />
mirarlo ‘con otros ojos’. Entre tanta sencillez, llama<br />
la atención el cambio automático en la columna<br />
de dirección (permite que el suelo sea plano)<br />
y las dos pantallas, compañeras obligadas en<br />
este viaje. La central ofrece navegación teniendo<br />
en cuenta la topografía del terreno, ya que una<br />
simple pendiente hará que caigan como losas dos<br />
kilómetros de autonomía mientras sólo he recorrido<br />
uno; y la segunda, tras el volante, informa<br />
sobre autonomía y velocidad, además de ayudar<br />
a vigilar la eficiencia al volante gracias a un sencillo<br />
gráfico.<br />
Pero como las autopistas y el i3 sólo pueden mantener<br />
su idilio durante un rato (se comería las baterías),<br />
me adentro por carreteras solitarias, más<br />
adaptadas a la baja velocidad que mantengo. Es<br />
entonces, al llegar a una rotonda, cuando caigo<br />
en la cuenta de que llevo algo más de una hora sin<br />
la menor fatiga y con el único inconveniente de<br />
la sujeción lateral, muy escasa en curvas cerradas.<br />
Supongo que detrás también viajaría de maravilla.<br />
De hecho, antes de salir probé a acomodarme<br />
y encontré espacio más que suficiente para las<br />
piernas de un adulto, cosa que se debe a que los<br />
respaldos delanteros son finísimos y la distancia<br />
entre ejes se ha alargado lo máximo posible.<br />
Respecto al equipaje, ¿qué necesitaría llevar consigo<br />
un viajero espacial? John Watts, en 1965,<br />
ocultó dentro de su traje un sandwich de chopped<br />
en plena misión Gemini III; y Alan Shepard, en<br />
1971, escondió una bola de golf y un hierro 6 y se<br />
puso a ‘hacer hoyos’ en la Luna, para desesperación<br />
de la plana mayor de Cabo Cañaveral. La picardía<br />
me tienta y si prefiero no llevar más que<br />
una simple mochila es para ahorrar peso, porque<br />
los 260 litros darían para un carro de la compra<br />
76 prueba a fondo