Lo QUE ES LA BIBLIA - OpenDrive
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Capítulo 14<br />
<strong>Lo</strong>s MEDIOS DE TRANSMISiÓN<br />
No solamente fueron necesarias la inspiración, conservación y<br />
colección de los libros de la Biblia, sino que hada falta también<br />
copiarlos y traducirlos con objeto de que también otros pueblos y las<br />
generaciones siguientes tuvieran acceso a las verdades que Dios había<br />
revelado. A este proceso de copiar y traducir las Escrituras se le llama<br />
transmisión de la Biblia.<br />
Para transmitir las verdades divinas los hombres de Dios se<br />
valieron de tres medios, que son: las lenguas, la escritura y los<br />
materiales e instrumentos de escribir.<br />
l. Las lenguas<br />
a. La importancia del lenguaje. El lenguaje es el medio que más<br />
utilizan los hombres para comunicarse entre sí. Aunque no es<br />
perfecto, nadie ha inventado otro mejor. No es de extrañar, pues, que<br />
en su sabiduría Dios haya utilizado este mismo medio para comunicarse<br />
con los hombres. <strong>Lo</strong> demuestra el hecho de que desde el<br />
principio les habló y sigue haciéndolo mediante la profecía y las<br />
lenguas (Génesis 2:16, 17; 3:8-19; 1 Corintios 12:10, 11).<br />
No obstante, está de moda en algunos círculos protestantes creer<br />
que Dios se comunica existencialmente con el hombre, prescindiendo<br />
del lenguaje por lo imperfecto que es éste como medio de comunicación.<br />
¿De qué habrían servido en tal caso las apariciones divinas, las<br />
visitas angélicas, los milagros, los sueños, las visiones y hasta la<br />
sublime manifestación de Dios en la carne si no hubieran sido<br />
acompañados por sus correspondientes mensajes? Faraón quedó<br />
perplejo con los sueños que tuvo hasta que José se los interpretó<br />
(Génesis 41:1-8). La zarza que ardía sin consumirse simplemente<br />
despertó la curiosidad de Moisés hasta que Dios le habló (Éxodo 3:2,<br />
3). y Jesús no sólo se presentó en el mundo e hizo maravillas, sino<br />
que también predicó y enseñó, comunicando así las verdades divinas<br />
(Mateo 4:23).