10.07.2015 Views

Manual MURCIA ORIENTA del SEF - croem

Manual MURCIA ORIENTA del SEF - croem

Manual MURCIA ORIENTA del SEF - croem

SHOW MORE
SHOW LESS
  • No tags were found...

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

5112. Las puertas <strong>del</strong> cieloFuente: adaptación Escuela de Psicoterapia ValenciaEn una ocasión, un samurai fuerte y corpulento fue a ver a un monje, y le preguntó:¿Existe el cielo? ¿Existe el infierno? ¿Dónde están las puertas que llevan a ellos? ¿Por dónde puedoentrar?Era un guerrero que no había ido a aprender ninguna doctrina; sólo quería saber dónde estabanlas puertas, para poder evitar la <strong>del</strong> infierno y entrar en el cielo.El monje, tras observar de arriba a bajo al poderoso guerrero, le preguntó:- ¿Quién eres?- Soy un samurai. Respondió el guerrero.El monje se rió y contestó:- ¿Enseñarte acerca <strong>del</strong> cielo y el infierno? ¿Un samurai, tu? Pareces un mendigo, unavergüenza para los otros samuráis. Apártate de mi vista.El samurai se puso furioso. Se crispó, se le encendió el rostro y enmudeció de rabia. Sacó su espaday ya estaba a punto de matar al monje cuando éste le dijo:- Ésta es la puerta <strong>del</strong> infierno. Esta espada, esta ira, este ego, te abren la puerta.El samurai se quedó desconcertado. La compasión y entrega de ese pequeño hombre, dispuesto aofrecer su vida para darle esa enseñanza y mostrarle el infierno, le conmovió. Lentamente fuebajando la espada lleno de gratitud y de repente se fue tranquilizando y el monje apaciblementedijo:- Aquí se abren las puertas <strong>del</strong> cielo.El cielo y el infierno están dentro de ti. Ambas puertas están dentro de ti. La mente es el cielo yel infierno, tiene la capacidad de convertirse en cualquiera de ellos. Pero seguimos pensando queexisten en alguna parte, fuera de nosotros mismos. El cielo y el infierno no están al final de la vida;están aquí y ahora.13. ConsejosFuente: José Antonio Marina, La atención esclaviza, en Revista de Psicología práctica, nº 79 página 39La admiración, el sentimiento estético, la alegría, el trabajo, los hobbies, los deportes, las metasclaras, nos liberan de nosotros mismos.En cambio, el egoísmo, el miedo, la pasividad, la rumia, el resentimiento, la envidia, la hipocondría,la depresión, absorben nuestra atención y, detrás de ella, los ánimos.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!