27.04.2013 Views

1998 Bolonia - Conferencia Interprovincial de Dominicos de ...

1998 Bolonia - Conferencia Interprovincial de Dominicos de ...

1998 Bolonia - Conferencia Interprovincial de Dominicos de ...

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

En la formación inicial dominicana, ¿se asegura comúnmente el <strong>de</strong>sper-<br />

tar a esta dimensión constitutiva dominicana?<br />

3.3.2. Los riesgos <strong>de</strong>l anzor<br />

Según fr. Herbert McCabe, ((si no amas, estás muerto; si amas, estás sen-<br />

tenciado)). La vida y la muerte <strong>de</strong> Jesús, la vida y la muerte <strong>de</strong> nuestro her-<br />

mano Pierre Claverie, lo testifican. La salvación viene <strong>de</strong>l amor. Amar es acep-<br />

tar ser vulnerable y <strong>de</strong>jarse herir. Es conocida la historia <strong>de</strong>l hombre que<br />

muere y quiere entrar en el cielo. El ángel guardián le pregunta: «¿Dón<strong>de</strong><br />

están tus heridas? -¿mis heridas?, respon<strong>de</strong>. No tengo ninguna)). Y el ángel,<br />

mirándolo con tristeza: «¿Así que no había nada por lo que mereciera la pena<br />

que te batieras?)).<br />

Incluso sin violencia física, habitar dos culturas es también un riesgo. Pero<br />

es una evigencia <strong>de</strong>l diálogo, como ya hemos dicho. Se trata <strong>de</strong> estar plena-<br />

mente en la cultura forjada por la tradición <strong>de</strong> la Iglesia y <strong>de</strong> la Or<strong>de</strong>n y <strong>de</strong><br />

estar plenamente en otra parte. Santo Domingo vivió esto: estaba iiz nzedio<br />

ecclesiae y más allá <strong>de</strong> las fronteras. Este canónigo suspiraba por el <strong>de</strong>seo <strong>de</strong><br />

ir a los Cumanos.<br />

Nuestra capacidad para asumir riesgos supondrá a veces incomprensio-<br />

nes, incluso tensiones, en el mismo seno <strong>de</strong> la Iglesia. En el capítulo general<br />

<strong>de</strong> Roma, se rindió homenaje a los hermanos Schillebeeckx, Congar y Chenu<br />

por haber sido fieles a la fe <strong>de</strong> la Iglesia «a pesar <strong>de</strong> las dificulta<strong>de</strong>s)). El reto<br />

para el fraile predicador es el <strong>de</strong> tomarse en serio las cuestiones nuevas en<br />

nombre <strong>de</strong> su fi<strong>de</strong>lidad a la misión confiada por Jesús a su Iglesia. Con fre-<br />

cuencia tendrá que explorar caminos teológicos nuevos, y pensar en cristiano<br />

lo que todavía no ha sido pensado.<br />

4.1. Tiempo <strong>de</strong> salir<br />

4.1.1. La Or<strong>de</strong>n y la Iglesia<br />

IV. PERSPECTIVAS DOMINICANAS<br />

La Iglesia nos confía misiones que una parte <strong>de</strong> los nuestros asumen y<br />

asumirán en un espíritu auténticamente evangélico. Sabemos a<strong>de</strong>más que la<br />

mayoría <strong>de</strong> nuestros conventos han formado en torno a ellos comunida<strong>de</strong>s<br />

<strong>de</strong> cristianos, a las que hay que asugurar el servicio <strong>de</strong> la palabra.<br />

Y, sin embargo, no todas las tareas <strong>de</strong> la Iglesia han <strong>de</strong> ser necesariamen-<br />

te las nuestras. ((Hacer lo que todo el mundo hace no es dominicano)), dice fr.<br />

Edward Schillebeeckx. Sin presunción, se ti-ata <strong>de</strong> hacer lo que otros no hacen.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!