report ; sportfish disease and parasite project - Uprm.edu

ISOPODA
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salinidades debe ser estudiada para ver si la supervivencia a largo plazo en
agua dulce es posible.
Localización en el huésped - Las hembras adultas se adhieren sobre la
lengua, orientadas hacia afuera. El macho se adhiere detrás y debajo de la
hembra, atravesado en los rastrillos de una de las cámaras de las agallas.
Tamaño - Hembra 2.3-3.8 cm, juveniles 6.5-9.7
mm de largo. Las primeras cuatro etapas juveniles
miden 6.7, 7.2, 8.1 y 9.0 mm de largo (Williams y
Bunkley-Williams en prensa).
Especificidad hospedera - Por lo general es un
parásito del jurel y del jurel ojón, ocasionalmente
de otros jureles, la barracuda Sphyraena barracuda
y otros huéspedes. En un acuario marino, los
isópodos juveniles infectarán casi cualquier pez.
Daños al huésped - Aparentemente le ocasiona
poco daño físico al huésped. Puede haber un
atraso en el crecimiento general. Los jureles
infectados con isópodos cambian sus patrones de
alimentación ordinarios, se presume que sea así
por el espacio que ocupan los parásitos en su boca.
Grandes cantidades de isópodos juveniles pueden matar peces de cualquier
tamaño. Los jureles juveniles pueden morir al estar infectados con unos
cuantos isópodos.
Cymothoa oestrum
Significado para la pesca recreativa - Este parásito puede matar unos
cuantos jureles, por lo que habría menos jureles disponibles para la pesca
recreativa. Los jureles infectados son más pequeños de lo que hubiesen
sido al no tener los isópodos. Los jureles con isópodos no pelean tan bien
o por tanto tiempo cuando se les captura con cordel y anzuelo, como los
jureles no infectados. Los isópodos grandes en la boca pueden alarmar a
algunos pescadores recreativos, pero no tienen efecto en la calidad del pez
como alimento.
En Puerto Rico, los jureles de mayor tamaño y las barracudas tienen la
mala reputación de ser portadores de cantidades perjudiciales de las toxinas
que causan el envenenamiento conocido como ciguatera. La venta de estos
peces está prohibida en la Isla. El folklore del Caribe sugiere que los peces
que acarrearon isópodos están libres de ciguatera. Se dice que en algunas
pescaderías de las Antillas menores, a los peces le añaden isópodos
ilícitamente para poder venderlos. Esto no ha sido comprobado por lo que
no debe considerarse un hecho. Se necesita investigar más detenidamente
para confirmar o negar esta intrigante idea.