18.05.2013 Views

Número 12 - CCH - Universidad Nacional Autónoma de México

Número 12 - CCH - Universidad Nacional Autónoma de México

Número 12 - CCH - Universidad Nacional Autónoma de México

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

itmo<br />

<strong>de</strong>liberadamente por parte <strong>de</strong> Charlotte,<br />

e ingenuamente por parte <strong>de</strong> Lolita.<br />

Ahora sin más ro<strong>de</strong>o, entramos a analizar<br />

a Lolita. Primero que nada, es oportuno<br />

recordar los pensamientos <strong>de</strong> Humbert<br />

en su primer encuentro: “una oleada azul<br />

se hinchó bajo mi corazón y vi sobre una<br />

esterilla, un estanque <strong>de</strong> sol, semi<strong>de</strong>snuda,<br />

<strong>de</strong> rodillas, a mi amor <strong>de</strong> la Riviera, que<br />

se volvió para espiarme por encima <strong>de</strong> sus<br />

gafas <strong>de</strong> sol. Era la misma niña: los mismos<br />

hombros frágiles y color <strong>de</strong> miel, la misma<br />

espalda esbelta, <strong>de</strong>snuda, sedosa, el mismo<br />

pelo castaño. Un pañuelo <strong>de</strong> topos<br />

anudado en torno a su pecho ocultaba a<br />

la mirada <strong>de</strong> mis viejos ojos lascivos, pero<br />

no a la <strong>de</strong> los recuerdos <strong>de</strong> mi adolescencia,<br />

aquellos senos juveniles que acaricié<br />

un día inmortal”.<br />

Por los pensamientos <strong>de</strong> Humbert po<strong>de</strong>mos<br />

<strong>de</strong>ducir que ese recuerdo imborrable<br />

grabado en su mente hizo que <strong>de</strong><br />

inmediato pensara en revivir aquel amor<br />

vivido en su adolescencia, y era obvio que<br />

no iba a <strong>de</strong>jar pasar esa oportunidad por<br />

nada <strong>de</strong>l mundo. No iba a <strong>de</strong>tenerse ante<br />

nada, y con tal <strong>de</strong> estar junto a Lolita, su<br />

máximo sacrificio fue casarse con la madre.<br />

Charlotte pronto se le reveló como<br />

una mujer muy posesiva, obsesionada<br />

con el pasado amoroso <strong>de</strong> Humbert. Pero<br />

soportarla era lo <strong>de</strong> menos para Humbert<br />

con tal <strong>de</strong> estar cerca <strong>de</strong> Lolita, a la que<br />

trataba <strong>de</strong> “hija” sin mostrar sus verda<strong>de</strong>ras<br />

intenciones.<br />

Pronto Humbert llegó a la conclusión<br />

<strong>de</strong> que Charlotte odiaba a su hija. Aunque<br />

era una mujer bonachona tenía una pésima<br />

imagen <strong>de</strong> su hija, a la que calificaba<br />

<strong>de</strong> agresiva, apática, bulliciosa, crítica,<br />

34<br />

<strong>de</strong>sconfiada, impaciente, irritable, negativa,<br />

obstinada y preguntona. Y gracias<br />

a este <strong>de</strong>scubrimiento fue que Humbert<br />

<strong>de</strong>cidió <strong>de</strong>shacerse <strong>de</strong> ella sin remordimiento.<br />

Pero, como sabemos, ni falta hizo<br />

que Humbert perpetrara su crimen, porque<br />

Charlotte murió atropellada, cuando<br />

salió <strong>de</strong> su casa fuera <strong>de</strong> sí tras enterarse<br />

<strong>de</strong> las verda<strong>de</strong>ras intenciones <strong>de</strong> su marido<br />

hacia su hija.<br />

Un siguiente momento importante es<br />

cuando Humbert y Lolita pasan su primera<br />

noche juntos, obligados por las circunstancias,<br />

pero con el beneplácito <strong>de</strong> él.<br />

Aquí Lolita reinicia su juego <strong>de</strong> seducción.<br />

Le dice a Humbert. “Cuando mi querida<br />

mamá lo <strong>de</strong>scubra, querido, se divorciará<br />

<strong>de</strong> ti y me estrangulará”. A lo que Humbert<br />

respondió: “Prácticamente soy tu padre.<br />

Siento gran ternura por ti. En ausencia <strong>de</strong><br />

tu madre, soy responsable <strong>de</strong> tu bienestar.<br />

No somos ricos, y mientras viajemos,<br />

estaremos obligados a… Tendremos que<br />

estar juntos bastante tiempo. Dos personas<br />

que comparten un cuarto inician<br />

inevitablemente una especie <strong>de</strong>… como<br />

diré… una especie <strong>de</strong>…” A lo que Lolita<br />

completó: “La palabra es incesto”.<br />

A partir <strong>de</strong> ahí empieza el largo viaje<br />

hacia ninguna parte, en el que Humbert<br />

está obsesionado con la i<strong>de</strong>a <strong>de</strong> poseer<br />

a Lolita. De mil y una maneras intenta<br />

acercarse a ella, pero ninguna resulta<br />

convincente. Hasta que un día fue Lolita<br />

quien tomó la iniciativa y sedujo a Humbert,<br />

en una situación que parecía que <strong>de</strong><br />

pronto el mundo se puso al revés: “No he<br />

<strong>de</strong> abrumar a mis cultos lectores con el informe<br />

<strong>de</strong>tallado <strong>de</strong>l <strong>de</strong>sparpajo <strong>de</strong> Lolita<br />

en materia sexual. Básteme <strong>de</strong>cir que no<br />

ritmo / nueva época<br />

Ritmo<strong>12</strong>.indd medio oficio.indd 34 14/08/2009 <strong>12</strong>:13:13 p.m.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!