Monedas regionales - Kennedy Bibliothek
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BERNARD LIETAER Y MARGRIT KENNEDY<br />
prejuicios son a menudo los esclavos ciegos de algún economista<br />
difunto." Lo que sería trágico, sin embargo, es que sobre la base<br />
de este malentendido se acabaría con una herramienta que podría<br />
manifestarse como vital para nuestro futuro colectivo, en Europa<br />
y en otros sitios.<br />
Los malentendidos comenzaron ya con las palabras clave<br />
asociadas al artículo. En efecto, incorporan las palabras "competencia<br />
frente al euro", "substitución de moneda", "Gesell", y<br />
"economía gris". La hipótesis implícita en un monopolio monetario<br />
está totalmente anclada en el conjunto de este análisis, y el<br />
concepto de complementariedad —siendo tan familiar en física,<br />
biología, medicina, filosofía y análisis literario, como hemos visto<br />
en el capítulo 4- no forma parte de este panorama. De donde se<br />
sigue la idea de que una moneda regional en paralelo con el euro<br />
sólo entraría en "competencia" o "sustituiría" al euro. Pretender<br />
que el movimiento Regio es una nueva molienda del movimiento<br />
geselliano porque ciertos regios utilizan el concepto de oxidación,<br />
inicialmente propuesto por Gesell hace más de un siglo, es tan<br />
gratuito como considerar fascista a toda persona que proponga<br />
o utilice una autopista porque Hitler fue el primero en construir<br />
las famosas Autobahn alemanas. Gesell quería explícitamente<br />
una reforma monetaria global, que él llamaba "economía libre"<br />
(Freiwirtschafi), en la que el monopolio de la moneda bancaria<br />
con tipos de interés positivos fuera sustituido por otro monopolio<br />
de una "moneda franca" con oxidación. Nada de esto es<br />
contemplado por los regios, ni siquiera en los sueños del más<br />
exagerado miembro de este movimiento. Al contrario, el euro es<br />
precisamente necesario para la creación y la puesta en marcha de<br />
las monedas <strong>regionales</strong> que aplican oxidación, como es el caso<br />
del Chiemgauer.<br />
Rósl está totalmente convencido de que se debe remplazar<br />
un monopolio por otro, por lo que se ve obligado a calcular el coste<br />
económico que un Chiemgauer supone al conjunto de la moneda en<br />
circulación en Alemania, llegando a la conclusión de que el resultado<br />
es de 130 millardos de euros. Nos encontramos ante la lógica del