Monedas regionales - Kennedy Bibliothek

BERNARD LIETAER Y MARGRIT KENNEDY
donde la dualidad monetaria no existe. Los Tolai, que constituyen
uno de los grupos étnicos más importantes de Papua, utilizan
tradicionalmente unas largas cadenas de conchas como moneda.
El gobierno de la provincia ha pedido que esta práctica se perpetúe:
encerrando la idea, de una parte, de revitalizar una tradición
cultural local, así como, de otra, preservar la economía local de
las influencias devastadoras del exterior. A lo largo de muchos
momentos difíciles de la historia de Papua Nueva Guinea, se ha
probado que el uso de la moneda-concha ha sido beneficioso: su
importancia ha sido vital durante las últimas crisis económicas 31 .
Los resultados en Papua son los mismos que en Bali, incluso
siendo los procesos totalmente diferentes: los Tolai son ante todo
cristianos —con restos de una vieja religión animista. En Bali es el
hiduismo la religión dominante. Las monedas complementarias
son igualmente diferentes en sus formas: los Tolai pagan con
conchas mientras que los banjar entienden el tiempo como dinero.
En ambos casos, los contextos son diferentes, especialmente
44 ! en lo concerniente a las amenazas que pesan sobre las culturas
locales. Y a pesar de las divergencias, los estudios llevados a
cabo en estos dos países muestran que la utilización de monedas
complementarias revitaliza la cultura local, estabiliza la economía
local y la sociedad en su conjunto.
¿Por qué no aprendemos nada de estos pueblos que han
adquirido, con el transcurso de los siglos, una gran experiencia
en el manejo de estos instrumentos monetarios?
El ejemplo de Bali nos muestra que tales sistemas sólo funcionan
en el seno de estructuras relativamente descentralizadas,
o donde la toma de decisiones se hace de forma democrática.
Es una condición esencial: toda la estabilidad del sistema balines
reposa en la existencia de esta democracia de base. La comunidad
en su conjunto decide qué se debe hacer, y cuando un proyecto
31 Esta moneda tradicional ha sido incluso incorporada a la modernidad; hasta el
punto, que existe en Papua Nueva Guinea el primer banco del mundo que utiliza la
moneda-concha.