Monedas regionales - Kennedy Bibliothek

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BERNARD LIETAER Y MARGRIT KENNEDY
8 LM moneda electrónica. Esta forma de moneda se desarrolla
cada vez más: hablamos de la virtualización del dinero. Supone
la existencia de cuentas electrónicas, de tarjetas para efectuar
los pagos y de una gestión centralizada de la información que
permite administrar los flujos monetarios. En la actualidad más
del 90% del dinero en circulación no existe sino bajo la forma de
registros informáticos. Muchas de las monedas complementarias,
aunque puedan a menudo adoptar las formas de billetes o bonos,
funcionan igualmente en formato electrónico.
• Formas combinadas. La combinación de dos o tres de estos
formatos permite aumentar considerablemente la flexibilidad del
sistema monetario. Si se considera la historia monetaria con carácter
general, nos podemos dar cuenta de que las formas monetarias
han evolucionado y se han hecho más prácticas y más manejables
con objeto de facilitar los intercambios. Al principio el dinero tenía
un valor físico: se utilizaba, por ejemplo, unas piezas de metal
precioso. Pero pronto los usuarios se dieron cuenta de que era más
simple y más seguro transportar documentos de pago: los cheques
y los billetes han hecho su aparición. En la actualidad, todavía,
resulta interesante destacar que los billetes británicos de una libra
esterlina llevan esta inscripción: "Soy deudor del propietario de
este billete con la suma de una libra". Una etapa suplementaria
en esta evolución ha sido la virtualización de la moneda, que ha
permitido que su circulación sea mucho más fácil, tanto como
los medios tecnológicos lo permiten.
Cada una de estas formas monetarias tiene sus ventajas e
inconvenientes. El trueque, que consiste en utilizar bienes para
organizar directamente el intercambio, es simple puesto que no
necesita de una infraestructura social o jurídica particular. Esta
es la razón por la que a menudo resurge en épocas de crisis
extremas o de desorganización social y caos. Esta forma de
moneda presenta igualmente la ventaja de ser muy segura, pues
los riesgos de falsificación son pequeños. Pero en función de las
formas que adopte puede llegar a ser poco práctica y manejable.