M9El Daño desde <strong>el</strong> Enfoque Psicosocialla participación vu<strong>el</strong>ve a aparecer como laestrategia metodológica que contribuye ala mitigación de este tipo de daños, ya queinvolucra activamente a los benefi ciarios d<strong>el</strong>os proyectos y presta atención al reconocimientode los diferentes aspectos que alinterior de la comunidad marcan diferenciastanto en las dinámicas cotidianas, como enlos impactos y los recursos de afrontamientodisponibles.4.5. La utilización arbitrariade los rituales, los símbolos ylos aspectos significativos deorden espiritual y culturalFrente a lo planteado en <strong>el</strong> numeral anterior,<strong>el</strong> romanticismo cultural aparece comola otra cara de la moneda, desde la que seasume sin discusión, que todos los aspectospropios de la cultura sobre la cual estátrabajándose son adecuados, sin cuestionarlos <strong>el</strong>ementos que desde allí pueden habercontribuido a la ocurrencia de la catástrofe,o sostienen asimetrías sociales e imposiciónde poderes (por ejemplo, los arreglos de géneroy generación que representan opresiónpara las mujeres, los niños y las niñas, oprácticas espirituales que involucran tanto lareproducción de estructuras asimétricas depoder como la amenaza a la integridad físicade algunos de los miembros de la comunidad).Estas dinámicas de poder son un <strong>el</strong>ementofrente al que debe permanecer atento <strong>el</strong>equipo de acompañamiento <strong>psicosocial</strong>.Para <strong>el</strong>lo, los derechos humanos sirvencomo referencia para la identifi cación deprácticas locales culturales y espirituales dañinasy sobre las cuales, la crisis representauna oportunidad para trabajar en su transformación.4.6. La exacerbación y <strong>el</strong> usod<strong>el</strong> dolor frente a donantesy financiadores“Después de lo ocurrido estamospeor, las ayudas no llegan y esoque todo <strong>el</strong> mundo supo lo quenos pasó […]. El Gobierno nosdijo que iba a invertir muchos millonesen proyectos, en trabajo,en casas nuevas, en <strong>el</strong> colegio,en la escu<strong>el</strong>a y no vemos que esose cumpla tampoco, muchos intentanayudarnos desde que estuvimosen Quibdó, pero las ayudasde unos y otros se tropiezanentre sí, se pisan, compiten y alfi nal esto se volvió una calenturay un desorden” 86 .Directamente r<strong>el</strong>acionado con la victimizacióny <strong>el</strong> uso d<strong>el</strong> dolor como herramientapara <strong>el</strong> reconocimiento, la estructura competitivasobre la que se sostiene la empresahumanitaria ha entrado en <strong>el</strong> uso de losmedios de comunicación y los testimoniosde las víctimas no como recurso para la sensibilizaciónde la responsabilidad social ciudadana,sino como herramienta publicitariapara <strong>el</strong> protagonismo y <strong>el</strong> recaudo de fondoseconómicos.86. Testimonio de una mujer de B<strong>el</strong>lavista, Bojayá, 2003, citado en B<strong>el</strong>lo & ál, Bojaya..., 21.54
El Daño desde <strong>el</strong> Enfoque PsicosocialM9Frente a este escenario es importante <strong>el</strong> fortalecimientode un discurso de los DerechosHumanos que demande <strong>el</strong> liderazgo d<strong>el</strong> Estadoen la coordinación de las acciones, con<strong>el</strong> propósito de restituir los derechos vulneradosy como objetivo que también debe estaren la base de la competencia de la empresahumanitaria. Este <strong>enfoque</strong> de derechos tambiéndebe servir de marco de referencia paraestablecer parámetros de desempeño en losmedios de comunicación, así como para lasensibilización de la responsabilidad socialciudadana.Pero las consecuencias de estacompetencia no están representadasen lo que pudiera llamarse “<strong>el</strong>mercado de lo humanitario”, sino enla gente: además de la tergiversaciónde los imperativos éticos desolidaridad y cooperación – y losque en suma, están representadosen los Derechos Humanos –, lo quese encuentra es una duplicación deesfuerzos, desperdicio de recursos,focalización excesiva, baja coberturageográfica y de servicios, y no enpocos casos, la fragmentación deequipos de trabajo 87 .Foto: Archivo PIUPC4.7. Agotamiento d<strong>el</strong> equipode acompañamiento“Para la mayoría de los trabajadoreshumanitarios… las presiones de unaemergencia exceden la propensión a laauto-reflexión. La triste ironía es quesin una auto-reflexión crítica, uno noes capaz de ver <strong>el</strong> daño inadvertido quecausa, ni de asumir los pasos necesariospara corregir y prevenir <strong>el</strong> daño” 88 .El personal que trabaja con cualquier tipo deviolencia está expuesto al desgaste profesional,<strong>el</strong> cual pone en p<strong>el</strong>igro la estabilidademocional y psicológica de los profesionales,la supervivencia de los equipos, y porende, es un potencial generador de daño,por lo tanto, merece un abordaje más amplio.Burn - outEl carisma y compromiso social son reemplazadospor malestares psicosomáticos.Físico:» Dolor de cabeza, cu<strong>el</strong>lo, espalda.» Problemas d<strong>el</strong> aparato locomotor, digestivo.» Irritabilidad.» Alteraciones d<strong>el</strong> sueño y apetito.» Problemas de pi<strong>el</strong>.» Mayor vulnerabilidad a todo tipo de enfermedades.87. Wess<strong>el</strong>ls, 7-8.88. Wess<strong>el</strong>ls, 7. Traducción propia.55