DOSIER319C imidurante la procesión del Encuentro, ceremonia de especial simbolismo,todavía sigue viva, aunque muy adulterada en su significadoritual original, en el pueblo de Tielmes, a orillas delTajuña. Yo mismo he podido contemplarla este mismo añode 1992. Perduran también en el mismo pueblo restos de loque antaño fue la Resto del Hornazo, nombre alusivo a un granpan con el que mozos y mozas celebraban una merienda enel campo el día siguiente al domingo de Resurrección.Con gran fervor ritual se cantaba la Salve y otros cantos religiososdurante la faena del esquileo de ganado lanar. García-Matos recoge en su cancionero cinco bellos y arcaicos ejemplos(n°s 317 al 321) correspondientes a los pueblos de Somosierra,Cenicientos, Lozoyuela, La Acebeda y La Puebla de la Sierra.Véase a continuación la tonada recogida en Lozoyuela cuyotexto corresponde al inicio del romance Coronado esto e' corderoque narra la coronación de espinas y el azotamiento de Cris--y-Co _ ro - nj —! —k-r L-r——V-CUT .NoJ i rti A ---f -1'—v~ ~t—', ti _ ros Ni de di _ ve - les nirro_ iasp Si _ noy Y Y " ~ ~de jun-coimi » rl , nos.to. El modo de Mi cromatizado luce aquí sus mejores galas:Casi perdidas están ya en la provincia las ceremonias propiasdel Mayo, con plantada de árbol en la plaza y demás ritualescaracterísticos. No obstante, y al igual que en zonas deCastilla-La Mancha, en un buen número de pueblos se siguencantando Los Mayos en la noche del 30 de abril. Así sucede enel citado pueblo de Tielmes donde sus habitantes se congregantodos los años para escuchar el canto de los Mayos cuyodeMadrid se siga conservandoel folkloremusical (si bien enun estado de agoníaprolongada) mejorque en algunas provinciascastellanas limítrofes.Ahí estánpara confirmarlo lasdoce cintas de casetteeditadas en los últimosaños por la casaSAGA con el títulogenérico deMadrid Tradicionalque contienen materialesde primera manograbados en lossiguientes pueblos:Guadalix de la Sierra,El Molar, San Martínde Valdeiglesias,Montejo de La Sierra,Colmenar deOreja, Robledondo,Cenicientos, Estremera,Fresnedillas deOliva, Robledo deChávela y Valdetorresde Jarama, representativostodosellos de lo que podemosencontrar ensus proximidades, Invitodesde aquí allector se someta alsano deleite de escucharestas grabacionesy compruebepor si mismo cuanarraigado está el folkloremusical en Madridaunque hayaperdido su antiguafuncionalidad y hoysólo sea recreaciónde lo que permaneceen el recuerdo comoalgo muy propio quese resiste a desaparecer.comienzo se transcribe a continuación:Otras costumbres descritas por el profesor García-Matos yque, en su mayoría, generaban cantos tradicionales, pertenecensólo al recuerdo. Tal es el caso de la tradición de La Maya,conocida tiempo atrás también en la capital, y los actos ritualesde las bodas cuando éstas se celebraban al estilo tradicionaly no en el restaurante de la villa como se hace ahora. Elcambio producido en los medios de trabajo agrícola ha supuestoasimismo el olvido casi absoluto de los cantos de aradasiembra, siega, trilla, acarreo del grano y demás tonadas relacionadascon el trabajo campesino.Pero, ¡qué queda realmente hoy de aquella música tradicionalque a mediados de siglo todavía se manifestaba en muchospueblos madrileños con vigor y autenticidad? El fuegodevorador de la gran ciudad se va extendiendo arrasando a supaso las costumbres tradicionales, pero llama la atención quea estas alturas del siglo XX en varias zonas de la provincia deSiguiendo el contenido de las cintas de SAGA, enumero acontinuación las especies de canto y baile recogidas recientementeen Madrid y que se encuentran en mejor estado deconservación. Son las siguientes; Rondas de Nochebuena, Villancicos,romances, cantos seriados, cantos de peticiones cuaresmales,cantos a la Virgen de Los Dolores en Viernes Santo,cantos de la procesión del encuentro en la mañana del Domingode Resurrección, rogativas, rondas de quintos, cantosde boda, un buen número de jotas y seguidillas y los castellanísimosbailes de la carrasquiña y la gerigonza, etc. Estos génerosde canto y baile están más generalizados que otros de los quesólo se han recogido ejemplos aislados como alguna tonadaalusiva al manteo de papeles en Carnaval, algún canto de laboreoy la mazurca importada y de adopción reciente. Entre losbailes locales merecen especial mención el Baile Tres de Robledondoque tiene antecedentes en el baile romancístico delmismo nombre observado por Menéndez Pidal a principios deÍ3ÍSCHERZO
MADRIDsiglo en el cercano pueblo abulensede Las Navas del Marqués, y el conocidoRondón de Robledo de Chávela,ejecutado en rueda con música dejota valseada. Los bales de bodas, enlos que se interpretaban sobre todojotas, reciben diversos nombres segúnel lugar La Manzana en Fresnedillasde Oliva. B Espigo o Baile delTálamo en Robledo y Las Redomasen Cenicientas.El folklore se conserva mejor enlos pueblos más alejados de la capital,sobre todo en los pertenecientes a lallamada Sierra pobre y a las zonasoeste, sur y sur-este de la provincia.En cuanto a la influencia de comarcascastellano-manchegas próximas, éstase hace evidente en algunas localidades,demostrándose, una vez más,que el folklore sobrevuela las fronterasadministrativas. Así. en San Martínde Valdeiglesias. Cenicientos y Robledondose perciben semejanzas o influenciasde la música del Valle delTiétar, del Campo de Talavera o deotras zonas dada la proximidad a lasprovincias de Avila o Toledo, Lo mismosucede en Colmenar de Oreja yEstremera, localidades situadas a caballoentre La Alcarria y La Mancha enlas que se interpretan jotas y seguidillasde estética musical inconfundible.Variado y rico es el muestrario deinstrumento? tradicionales que encontramosen la provincia de Madrid. Enla enumeración seguiré la ya clásicaclasificación de Hombostel-Sachs paratratar de poner orden en la relativaabundancia que se produce en unademarcación, como la que nos ocupa,de mediana extensión geográfica. Entrelos cordófonos predomina, comoen tantas regiones españolas, la rondalla,formada por laúdes, bandurrias /guitarras. Dos instrumentos destacanentre los aerófonos: La dulzaina, llamadagaita y hasta chirimía en algunoslugares, y la gaita pastoril de la Sierra.La gaita de la Sierra, instrumento deenorme parecido en forma y tipologíaa la alboka vasca, fue localizada por M.García-Matos en Lozoyuela. Bustarviejo,Valdemanco, La Cabrera y en algúnotro pueblo más al norte. Instrumentode rústica construcción y muy primitivo,es de los de tipo clarinete con lengüetabatiente. Consta de tres partes:un tubo afinado llamado gaita construidonormalmente de palo de higueray dos llamados cómalos, uno parasoplar y otro para amplificar el sonido& )Los membranófonos se usan ennuestra provincia para acompañarcon sus ritmos los más variados cantosy bailes tradicionales, desde villan-Bibliografía y grabacionesfonográficas de interésRecopilaciones:PEDRELL. Felipe: Cancionero Musical PopularEspañol, Valls-Barcelona. 1917-1922, Recoge 8tonadas madrileñas: Tomo I, núms. 20, 21, 22. 23,168: tomo II, núms. 199, 200, 265-2<strong>66</strong>.DÍAZ CARBONEL, P.: Cancionero de Madrid,1927. Libro algunas veces citado, es sólo literarioy contiene, sobre todo, canciones cultas de autor.No tiene interés musical.RODRÍGUEZ MATA, Magdalena: Recopiló42 canciones en los asilos de Madrid los mesesde mayo-junio de 1945 por encargo del InstitutoEspañol de Musicología. Algunas de estas tonadasfueron incluidas en el cancionero de M, García-Matos con la indicación Madrid.GARCIA-MATOS. Manuel: Cancionero Popularde la Provincia de Madrid. Barcelona-Madrid,1951-1960, 3 Vols. Obra maestra en su género.La más importante para información y estudio delfolklore musical madrileño, contiene 816 transcripcionesmusicales.FRAILE GIL José Manuel: Romancen Tradicionalde la Provincia de Madrid, Madrid. Comunidadde Madnd-Consejería de Cultura, 1991. Obra importantepor la gran cantidad de textos romancísticosrecogidos, casi 400 incluidas variantes. Conclasificación algo desordenada, incluye además -45transcripciones musicales,Trabajos y estudios:GARCIA-MATOS, Manuel: «Instrumentosmusicales folklóricos de España: La Gaita de laSierra de Madrid», en Anuario Musical, 11(1956),págs. 124-131.MOTA MURILLO, Rafael: «Canciones madrileñasde trabajo (Anotaciones a un cancionero)»,en Anoíes efe' Instituto de Estudios Madrileños, XX(19<strong>66</strong>). Se trata de un estudio musical y literariode las canciones de trabajo contenidas en el cancionerode M. García-Matos.TORRES MULAS, Jacinto: «Parentescos de lagaita de la Sierra de Madrid». En Actas de las ¡jornadasde Estudios sobre la Provincia de Madnd Madrid:Diputación Provincial. 1981, p, 503-508.Grabaciones:Magna Antología del Folklore Musical en España,Madrid, Hispavox, 1979. Materiales recogidospor M. García-Matos y preparados por M* delCarmen García-Matos Alonso. La mejor selecciónantológica hasta ahora publicada con documentosmusicales de primera mano tomados de latradición oral de todas las regiones españolas,Contene 8 documentos grabados en la provinciade Madrid.SAGA, Sello fonográfico independiente, haeditado varias cintas de casette y discos con materialesoriginales interesantísimos. Referencias:VPC-159, 160, 161. 162, 1<strong>66</strong>, 169, 170, 177, 178,187, 193, 209, 210 correspondientes a las cintas;y VPD-1097, 1098, 2040 correspondientes a losdiscos.ciscos de Navidad hasta jotas, seguidillasy rondas. Son conocidos enMadrid el pandero, la pandereta, lazambomba, el tambor, la tambora yla pandera. La tambora de la zona deSan Martín de Valdeiglesias es degran tamaño y está construida conun recipiente normalmente de latónal que se acopla una piel de oveja,conejo o perro. Las panderas songrandes panderos construidos conantiguas cribas de cerner el harina.Muy numerosos son los idiofonosque acompañan a cantos y bailes consus variados timbres sonoros. He podidolocalizar los siguientes: Almirez,mortero, botella labrada, triángulo,arrabel (huesera), sartén, castañuelas,cencerros, esquilas, latones golpeadoscon palos, calderos, barriles deescabeche y cucharas de madera. Elarrabel es un instrumento pastorilque normalmente acompaña a la gaitaserrana (Fig. 3). Utilizado tambiéncomo instrumento de percusión enotras zonas no serranas de la provincia,también es conocido con diferentesnombres en varias regionesespañolas. Está construido con unafila de huesos de pata de cordero ocabrito y el sonido se produce medianteel rascado de los huesecilloscon castañuelas. Los calderos conasa se utilizan como instrumentospercusivos en San Martín de Valdeiglesiaspara acompañar villancicos navideñosy otros cantos populares,Los llamados zambomberos de Colmenarde Oreja, en la Alcarria madrileña,golpean rítmicamente en barrilesde escabeche vacíos para animarlas fiestas del pueblo.Hasta aquí el breve recorrido ycomentario del folklore musical madrileño.Sólo resta decir que nada especialse puede destacar, ni en lamúsica ni en los instrumentos musicales,que no sea la pertenencia de laprovincia a una tradición común másamplia que es la de la meseta castellana,si bien se observa aquí, comoha quedado dicho al principio, unconservadurismo que tiene más méritoque en otras partes por la influenciaa todas luces negativa de lacapital y de otras zonas urbanas próximasque poco a poco van penetrandoen el territorio haciéndoleperder el aspecto rural que hasta hacepocos años tenía. Los habitantesde la capital están invadiendo sierras,vegas, valles y llanos con sus nuevasresidencias de fin de semana ¿Hastacuándo aguantará el folklore madnleñoesta dura embestida?Emitió Rey GarcíaSCHERZO 137