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Breve historia del Africa subsahariana - Eric Garcia Moral

Conozca la historia del hombre en África, la más antigua de todos los continentes cuya trayectoria ha estado siempre en conexión con el resto del mundo. Desde la aparición de los primeros homínidos en África hasta la trata de esclavos, el colonialismo, la descolonización o el apartheid sudafricano. Eric García Moral abre al lector una ventana a las sociedades africanas desde la prehistoria hasta nuestros días, a través de la cual mejorará su comprensión respecto a la evolución histórica y al estado actual de África y sus gentes. Breve historia del África subsahariana derrumbará estereotipos como el que se refiere a un continente sin historia, detenido en el estadio tribal. La historia africana es dinámica, continua, con altos y bajos, con períodos de esplendor y decadencia, y con una significativa conexión con el resto del mundo. Con una narración amena, alejada del academicismo habitual, el lector se acercará a episodios de la historia africana que muy probablemente desconozca desde un enfoque muy alejado del eurocentrismo imperante.

Conozca la historia del hombre en África, la más antigua de todos los
continentes cuya trayectoria ha estado siempre en conexión con el resto del
mundo. Desde la aparición de los primeros homínidos en África hasta la trata
de esclavos, el colonialismo, la descolonización o el apartheid sudafricano.
Eric García Moral abre al lector una ventana a las sociedades africanas
desde la prehistoria hasta nuestros días, a través de la cual mejorará su
comprensión respecto a la evolución histórica y al estado actual de África y
sus gentes.
Breve historia del África subsahariana derrumbará estereotipos como el que
se refiere a un continente sin historia, detenido en el estadio tribal. La historia
africana es dinámica, continua, con altos y bajos, con períodos de esplendor
y decadencia, y con una significativa conexión con el resto del mundo. Con
una narración amena, alejada del academicismo habitual, el lector se
acercará a episodios de la historia africana que muy probablemente
desconozca desde un enfoque muy alejado del eurocentrismo imperante.

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esistencia. Por ejemplo, un sector activo fue el de los estudiantes, reunidos alrededor<br />

de la Organización de Estudiantes Sudafricanos (SASO), liderados por Steve Biko.<br />

La organización, sin embargo, fue ilegalizada en 1973 y su líder encarcelado y<br />

asesinado tres años más tarde. También lucharon por sus derechos los obreros: en<br />

1974 tuvieron lugar unas 374 huelgas que involucraron a 58 000 obreros africanos,<br />

quienes ganaron modestas mejoras salariales. Las organizaciones de trabajo, a partir<br />

de 1979 legales, desempeñaron un rol clave en la lucha por la liberación. En 1976,<br />

hubo una revuelta en Soweto, uno de los lugares a los que los africanos eran<br />

confinados en la ciudad de Johannesburgo, que se saldó con 575 muertes y más de<br />

dos mil heridos.<br />

En 1982, la recesión económica no hizo más que agravar la situación. En el<br />

interior <strong>del</strong> país la violencia de ambos bandos escalaba hasta cotas insoportables. El<br />

brazo armado de la organización Inkatha, de base zulú, llegó incluso a asociarse con<br />

la policía afrikáner para enfrentarse al enemigo común: el ANC. El boicot<br />

internacional, pese a su timidez y cinismo, empezó a hacerse sentir en esos años. Los<br />

afrikáneres ricos no estaban satisfechos con el aislamiento: querían viajar y tener el<br />

mismo acceso a los privilegios que cualquier ciudadano de otro país tenía en el marco<br />

global. Los boicots quizá no aislaron económicamente a Sudáfrica, pero sí que<br />

afectaron a su discurso moral y a su relación con el mundo.<br />

Cuando se iniciaron los contactos entre el régimen <strong>del</strong> apartheid y los líderes<br />

africanos, estos, incluido Man<strong>del</strong>a, seguían encerrados en Robben Island. Finalmente,<br />

Man<strong>del</strong>a fue liberado en febrero de 1990 y el ANC volvió a legalizarse. Entre 1991 y<br />

1994, el ANC aceptó trabajar con el Partido Nacional (NP) afrikáner liderado por<br />

Frederik de Klerk para asegurar un gobierno interino y detener la violencia a cambio<br />

de fijar una fecha para unas elecciones democráticas en la que todos pudieran votar.<br />

Esta se produjo en abril de 1994, y el ANC de Man<strong>del</strong>a resultó ganador con un<br />

sesenta por ciento de los votos, por un treinta por ciento <strong>del</strong> NP y un diez por ciento<br />

<strong>del</strong> Inkhata. Treinta y siete años después de la independencia de Ghana, los africanos<br />

de Sudáfrica eran, por fin, libres. Man<strong>del</strong>a renunció a tomar represalias, que habría<br />

sido el camino fácil, y garantizó a los miembros y simpatizantes <strong>del</strong> NP los derechos<br />

que estos habían negado a la población negra durante años. El líder sudafricano<br />

completó así su larga marcha hacia la libertad y lo hizo, además, consiguiendo algo<br />

que muy pocos padres de la nación africanos habían hecho: se retiró tras su mandato<br />

y pasó el poder a un sucesor elegido.<br />

www.lectulandia.com - Página 167

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