Breve historia del Africa subsahariana - Eric Garcia Moral
Conozca la historia del hombre en África, la más antigua de todos los continentes cuya trayectoria ha estado siempre en conexión con el resto del mundo. Desde la aparición de los primeros homínidos en África hasta la trata de esclavos, el colonialismo, la descolonización o el apartheid sudafricano. Eric García Moral abre al lector una ventana a las sociedades africanas desde la prehistoria hasta nuestros días, a través de la cual mejorará su comprensión respecto a la evolución histórica y al estado actual de África y sus gentes. Breve historia del África subsahariana derrumbará estereotipos como el que se refiere a un continente sin historia, detenido en el estadio tribal. La historia africana es dinámica, continua, con altos y bajos, con períodos de esplendor y decadencia, y con una significativa conexión con el resto del mundo. Con una narración amena, alejada del academicismo habitual, el lector se acercará a episodios de la historia africana que muy probablemente desconozca desde un enfoque muy alejado del eurocentrismo imperante.
Conozca la historia del hombre en África, la más antigua de todos los
continentes cuya trayectoria ha estado siempre en conexión con el resto del
mundo. Desde la aparición de los primeros homínidos en África hasta la trata
de esclavos, el colonialismo, la descolonización o el apartheid sudafricano.
Eric García Moral abre al lector una ventana a las sociedades africanas
desde la prehistoria hasta nuestros días, a través de la cual mejorará su
comprensión respecto a la evolución histórica y al estado actual de África y
sus gentes.
Breve historia del África subsahariana derrumbará estereotipos como el que
se refiere a un continente sin historia, detenido en el estadio tribal. La historia
africana es dinámica, continua, con altos y bajos, con períodos de esplendor
y decadencia, y con una significativa conexión con el resto del mundo. Con
una narración amena, alejada del academicismo habitual, el lector se
acercará a episodios de la historia africana que muy probablemente
desconozca desde un enfoque muy alejado del eurocentrismo imperante.
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Man<strong>del</strong>a estrecha la mano de Gatsha Mangosuthu Buthelezi, líder <strong>del</strong> Inkhata<br />
zulú, bajo la atenta mirada de De Klerk (NP) justo después de las elecciones de<br />
abril de 1994.<br />
Namibia, la alargada sombra <strong>del</strong> apartheid<br />
Tras el final de la Primera Guerra Mundial, el África <strong>del</strong> Suroeste (actual Namibia) se<br />
convirtió en territorio bajo mandato de la Sociedad de Naciones y su administración<br />
pasó a depender de Sudáfrica. Al finalizar la Segunda Guerra Mundial, la flamante<br />
Naciones Unidas previó que los territorios africanos bajo mandato (como Togo y<br />
Camerún) irían ganando autonomía de forma paulatina y acabarían accediendo a la<br />
independencia. En la década de 1960, cuando el resto de territorios lograban la<br />
emancipación, la intransigencia de la administración sudafricana negó ese derecho al<br />
pueblo <strong>del</strong> suroeste africano. Sudáfrica absorbió el territorio dentro de sus fronteras y<br />
traspasó hacia allí la legislación y prácticas <strong>del</strong> apartheid y la segregación racial. La<br />
ONU recurrió a la Corte Internacional de Justicia (CIJ) y ambos declararon la<br />
ilegalidad de la presencia sudafricana en territorio namibio. En 1971, la CIJ convocó<br />
a todos los miembros de la ONU para que estos declararan la ilegalidad de esa<br />
presencia. Dos años más tarde, se declaró a la Organización <strong>del</strong> Pueblo de África <strong>del</strong><br />
Suroeste (SWAPO) la organización política mayoritaria, como la única y auténtica<br />
voz <strong>del</strong> pueblo namibio, convirtiéndose así en representante oficial de Namibia en el<br />
escenario internacional.<br />
Mientras tanto, Sudáfrica utilizaba Namibia para fomentar la desestabilización de<br />
Angola y <strong>del</strong> MPLA comunista, con ataques militares y el apoyo a UNITA.<br />
El régimen segregacionista y racista impuesto por la minoría blanca sudafricana<br />
acabó llevando al SWAPO a crear un brazo armado, el Ejército Popular de Liberación<br />
de Namibia (PLAN), que contó con el apoyo <strong>del</strong> bloque comunista y China. Como en<br />
el caso sudafricano, las bases de la organización se situaron en los países vecinos. La<br />
guerrilla, que no tuvo el mismo peso que en Zimbabue, fue combatida con mano dura<br />
por las tropas sudafricanas, cuya represión fue tan dura como en su propio país. En<br />
www.lectulandia.com - Página 168
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