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El Alto 68
Repensar La Fiesta Andina en Tiempos de un Folclore Cuir
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por el uso de máscaras como condición para
bailar la Tunantada. Como ya se mencionó,
todos los danzantes deben estar enmascarados.
Asimismo, cada cuadrilla baila por su cuenta
ante el toldo que le ha sido asignado, y con el
Cuadrillas haciendo la danza
tradicional de la Tunantada y
espectadores en la Plaza Juan Bolívar
Crespo, Yauyos, Provincia de Jauja
(Perú), 2017. © Enzo Vasquez Toral.
enmascaramiento y la mirada inquisidora de la
comunidad, los danzantes cuir a veces viajan en
grupo, se cuidan mutuamente, y festejan juntos.
Como condición primera, son la camaradería y el
afecto folclórico cuir compartido los que hacen
que su participación en la Tunantada sea viable.
Al margen de los diferentes grados de inclusión,
es innegable el aporte que algunos danzantes
cuir han hecho a la Tunantada. Uno de los más
conocidos se llama Henry Posadas, y actualmente
se encuentra asociado a la cuadrilla a cargo de
la Asociación de Tunanteros del Barrio Industrial
La Primavera. La mayoría de los danzantes cuir
no reside en Jauja, y si bien algunos son oriundos
Henry Posadas baila como sicaína en las
festividades de almuerzo con la Asociación
de Tunanteros del Barrio Industrial La
Primavera, Provincia de Jauja (Perú),
2019. © Enzo Vasquez Toral.
de la zona, como es el caso de Henry, muchos
migraron en busca de espacios más tolerantes,
como Lima, o bien otros países. Henry ha
estado bailando durante casi 40 años, desde su
adolescencia, época en la que solía representar
personajes masculinos. Hoy día, hace de los tres
personajes femeninos con total naturalidad,
y es famoso por haber aportado disfraces
innovadores que muchos celebran e imitan.
El caso de Henry pertenece al de un puñado
de danzantes cuir cuyo talento y trabajo han
aportado una diferencia a la Tunantada, y
ha permitido que las nuevas generaciones
cuir encuentren su espacio en la danza y la
celebración. Hace muy poco, Henry apareció
en los diarios locales, y en diciembre de 2018
recibió un premio de la Asociación de Periodistas
y Comunicadores de Radio y Televisión del Perú
en reconocimiento de su labor en pro del folclore
peruano. Si bien la comunidad de la Tunantada
en general resta importancia al aporte de los
danzantes cuir, el talento de Henry como artista
es un recordatorio constante de que estas
contribuciones no pueden ser silenciadas.
Los personajes tradicionales del
waphuri (izquierda) y de la Awila
(derecha) danzan en un bloque de la
Kullawada (atrás) durante La Fiesta
del Gran Poder, La Paz, Bolivia,
2017. © Enzo Vasquez Toral.
acompañamiento de su banda musical, aunque
sumergida en un mar de espectadores que
apenas si le dejan espacio para moverse.
Las identidades se ocultan constantemente, y
las máscaras contribuyen a este fin. En relación
con los danzantes cuir en particular, la máscara
es un ticket de ingreso tanto como un paradójico
habilitador de visibilidad. Así, el ocultamiento
absoluto del rostro a través de la máscara y el
abundante disfraz facilitan el afecto cuir y su
encarnación a través de la danza. Cada cuadrilla
elige a sus danzantes, y no existe ninguna
compuesta exclusivamente por danzantes cuir.
Esto significa que los participantes cuir bailan
codo a codo con sus pares heterosexuales —ya
sean hombres o mujeres—, y ante un público que
escudriña, los ve como fetiches, y en ocasiones
festeja sus aptitudes dancísticas, siempre y
cuando no se saquen la máscara. 10 Ante el
El waphuri Galán en la fiesta boliviana
La Familia Galán es un colectivo transformista
con sede en La Paz, Bolivia, y descrito como
“un grupo de activistas transformistas por
los derechos sexuales y de género. 11 Desde
su creación, hacia fines de los años 90, los
integrantes de este colectivo han trabajado en
Bolivia interviniendo espacios en discotecas gay,
marchas, concursos y desfiles LGBTQI+, y han
curado exposiciones de arte visual, producido
obras de teatro y desfiles, y aparecido y
publicado en revistas y diarios locales. Asimismo,
vienen contribuyendo al folclore boliviano desde
2001, mediante su participación como danzantes
en fiestas como el Carnaval de Oruro y La Fiesta
del Gran Poder, en la ciudad de La Paz. 12 En
particular, la Familia Galán creó un personaje
llamado waphuri Galán, que participa de la
danza de la Kullawada, baile que integra ambas
festividades.
Si bien el waphuri fue un personaje permanente
de la Kullawada durante varias décadas, el
waphuri Galán es una versión cuir y remozada del
original. La Kullawada es una alegoría referente
a los hilanderos locales que se baila en bloques
o grupos, y cuyos orígenes se remontan a fines
del Siglo XIX. 13 Entre los muchos personajes,
el waphuri se destaca como figura solista, y
representa al capataz del grupo de hilanderos. 14
La primera figura transformista de la Kullawada es
la Awila (o abuela), representación paródica de
una anciana que baila cerca del waphuri al frente
del bloque (Imagen 5).
Sin embargo, la familia Galán llegó para
“mariconizar” al waphuri a través de un
transformismo que se dio un poco por casualidad.
Paris Galán (uno de los transformistas del
colectivo) fue invitado a danzar como waphuri
tradicional en la fraternidad de la Kullawada en