Mario luna -PSICOLOGIA DEL EXITO -

Sea en el deporte, trabajo, negocios o incluso el amor, la competición
justa permite superarse a sus participantes. A la larga, todos
ellos pueden salir ganando. Aunque pierdan constantemente.
Ésa es la magia de la competición: que nos hace mejores. Y también
la principal razón por la que vale la pena competir.
Excusator: Lástima que sea tan estresante.
Pollo: En eso el profe de mates tiene razón. A mí me
pone muy nervioso competir.
Excusator: Sí. Tanto hablar de cuerpo G y ahora promovéis
algo que sin duda elevará el cortisol de
vuestro lector.
Mario Luna: No has entendido nada.
Competir es una de las cosas más sanas que hay, siempre que lo
hagas como un ganador y no como un atrapado.
¿La diferencia?
El atrapado la usa para ganar al de al lado. El ganador, para acercarse
a su propio potencial.
El atrapado compite en el juego que le marcan. El ganador sólo
compite en un juego diseñado por él. Tiene sus propios valores y,
por lo tanto, sus propias reglas.
Él decide cuándo gana y cuándo pierde. Nunca un resultado.
Excusator: Pero ¿qué tontería es ésa? El resultado siempre
decide quién gana y quién pierde.
Mario Luna: Es que, en el fondo, un ganador nunca pierde
del todo.
Tu Mejor Tú: Aunque otro se lleve el oro, si un ganador
se supera ya es una victoria.
Por eso, el éxito ajeno no puede jamás anular tu propio éxito. Eso
sólo puede hacerlo tu conformismo o jugar el juego equivocado.
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