Mario luna -PSICOLOGIA DEL EXITO -

Ahora puede que se quede en la actividad de unos cuantos troles
en tu blog personal. En el Paleolítico era una llamada urgente a
ponerte de inmediato en tu sitio.
A hostiazo limpio.
O peor aún: expulsándote del grupo.
Oliva: ¿Tan grave era eso?
Tu Mejor Tú: Piensa que hablamos de una época en la
que, sin tu tribu, tenías el futuro más negro que una
cucaracha.
Conslenta: ¿Comprende usted ahora por qué mi sobrina
es tan conservadora?
Entiéndelo.
Ella va a estar cómoda con un autoconcepto que gire en torno a
cosas como:
“Cobro x cantidad de dinero, disfruto de x cantidad de vitalidad
y energía, tengo x capacidad para atraer a las personas que me
gustan, cuento con x talento para llevar a cabo mi trabajo, x grado
de creatividad para perseguir mis sueños…”.
Siempre, claro está, que x se mantenga en la zona mediocre.
Por eso, si nada le indica lo contrario, MIA asumirá por tu bien que
eres un pringado más. Del montón.
Oliva: Pero… ¡Un momento! Hay algo que no entiendo.
Tu Mejor Tú: Dispara.
Oliva: Mi autoconcepto le dice a MIA qué grado de confianza
y competencia darme.
Tu Mejor Tú: Sí.
Oliva: Pero MIA es la que me da un autoncepto u otro,
¿no?
Excusator: Exacto, niña. Es una perogrullada.
Borregator: Te están mareando.
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