Mario luna -PSICOLOGIA DEL EXITO -

Mientras ellos se dejaban la vista descifrando sucios pergaminos
a la luz de una vela, tú tienes el inagotable macrocosmos del conjunto
del conocimiento humano a un par de clics.
O tres palabras dictadas.
Newton y Galileo se mueren (de nuevo) por resucitar en esta
época de posibilidades y oportunidad. Época que tú estás dejando
pasar entre episodio y episodio de tu serie favorita.
Y ni siquiera hace falta ir tan atrás.
Hace tan sólo tres o cuatro décadas, ¿qué dirigente de país no
habría movido cielo y tierra por acceder al manantial de información
que sostienes en la palma de tu mano?
Pollo: ¿Todo eso dicen las líneas de la mano?
Oliva: Primo, se refiere a tu dispositivo móvil.
Sí, a esa maravilla que tú usas para enviarle mensajitos al engreído
cabeza hueca que te los puso con tu mejor amiga. O a esa tontaina
que pasa de tu cara.
Deja de hacerlo. No le des la espalda a la bendición tecnológica.
A lo largo de la historia, enteros imperios se han forjado de la
noche a la mañana gracias a ligeros avances científicos. ¿Y tú vas
a subestimar el poder que te brinda la revolución tecnológica que
se está desplegando en tus propias narices?
Este libro, sin ir más lejos, ha tomado forma a un ritmo y con una
eficiencia que están haciendo llorar de envidia al mismísimo Aristóteles.
Esa lluvia que cayó hace poco… Sí, eran sus lágrimas.
Buena parte de lo que estás leyendo se ha escrito mientras entrenábamos,
cuando viajábamos, haciendo la compra e incluso
fregando los platos.
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