La Caída del Dragón y del Águila - World Center of Humanist Studies
La Caída del Dragón y del Águila - World Center of Humanist Studies
La Caída del Dragón y del Águila - World Center of Humanist Studies
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
sociedad que va dejando atrás sueños decimonónicos de pesadas industrias e ideologías<br />
para convertirse en modernos, pragmáticos y “eficientes” managers de una China ya<br />
decididamente mercadotécnica.<br />
Esta generación se verá ante el fuerte desafío de justificar la existencia de un partido<br />
comunista como partido único, ante la evidente desaparición de la carga ideológica <strong>del</strong><br />
mismo y frente a las tendencias individualistas surgidas de la acogida fervorosa de la<br />
teoría y práctica de mercado.<br />
En términos de género, muy poco progreso se ve en el sistema político chino en<br />
cuanto a la participación femenina. De aquellos 538 líderes de la quinta generación<br />
estudiados en el informe citado anteriormente, sólo 60 son mujeres (poco más que el<br />
11%). En el actual grupo reducido de las 9 máximas autoridades <strong>del</strong> Comité<br />
Permanente, al igual que en todos los anteriores desde la Revolución, no hay ninguna<br />
mujer. Esta pesadilla de representatividad de género en dirección contraria a la<br />
tendencia mundial, podría generar fuertes conflictos a la hora <strong>del</strong> respaldo <strong>del</strong> gobierno<br />
en la población. Sobre todo si se toma en cuenta que, por fuera <strong>del</strong> partido y <strong>del</strong><br />
gobierno, cada vez más mujeres van tomando posiciones de relevancia en la sociedad<br />
china.<br />
Veamos por último el panorama de relativa fricción que presentará la disputa entre<br />
las principales facciones actuantes en esta quinta generación. Los princelings, entre<br />
quienes se menciona a Xi Jinping como una de sus principales figuras, tienden a ser más<br />
expertos en la administración concreta, estando ligados a relaciones y padrinazgos que<br />
los han situado ya tempranamente en situación de secretarios o aprendices de funciones<br />
de gobierno. Son más proclives al aperturismo, a una fuerte relación con el Occidente y<br />
sus multinacionales y son más reacios a la exposición electoral interna. Este grupo<br />
responde políticamente a la sucesión de Jiang Zemin y la llamada “coalición elitista”<br />
que tenía como centro al “grupo de Shanghai”.<br />
Sus adversarios internos, los tuanpai, son protegidos <strong>del</strong> actual mandatario Hu Jintao<br />
y se corresponden con el mote de “coalición populista”. Éstos son mucho más<br />
propensos a medidas de impacto social interno y debido a su experiencia intrapartidista<br />
en términos electorales, tienden algo más a considerar cierto tipo de democracia como<br />
una política que los favorece. Su figura preeminente en la actualidad es Li Keqiang,<br />
egresado en Economía de la Universidad de Beijing, en la cual ya era máximo<br />
responsable estudiantil a sólo dos años de haber ingresado al partido en 1976.<br />
Ante este panorama, salvada las distancias y la coraza por ahora impenetrable <strong>del</strong><br />
sistema de partido único, uno podría tener la sensación de estar ante un curioso<br />
bipartidismo, a la usanza de la habitual coalición sistémica en tierras <strong>del</strong> <strong>Águila</strong>, donde<br />
republicanos hijos de republicanos pretenden agudizar la dictadura de mercado y<br />
demócratas emergen con rostro de bonachones legisladores más preocupados por<br />
cuestiones de caridad social. Todos ellos sonrientes, igual que sus colegas chinos.