24.06.2015 Views

segundo%20libro%20Cincuenta%20sombras%20oscuras

segundo%20libro%20Cincuenta%20sombras%20oscuras

segundo%20libro%20Cincuenta%20sombras%20oscuras

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Una vez me dijo que no podía ni imaginar siquiera hasta dónde llegaba su<br />

depravación. Bueno, ahora ya me lo ha contado y, conociendo cómo fueron los<br />

primeros años de su vida, no me sorprende… aunque me impactó mucho oírlo en voz<br />

alta. Al menos me lo ha contado… y parece más feliz después de haberlo hecho. Ahora<br />

lo sé todo.<br />

¿Eso devalúa su amor por mí? No, no lo creo. Él nunca se había sentido así,<br />

ni yo tampoco. Esto es nuevo para ambos.<br />

Los ojos se me llenan de lágrimas al recordar que, cuando dejó que le<br />

tocara anoche, cayeron sus últimas barreras. Y que tuvo que aparecer Leila con toda su<br />

locura para que llegáramos a ese punto.<br />

Tal vez debería estar agradecida. Ahora, el hecho de que él la bañara ya no<br />

me deja un sabor tan amargo. Me pregunto qué ropa le dio. Espero que no fuera el<br />

vestido de color ciruela. Me gusta mucho ese vestido.<br />

Así que ¿puedo amar incondicionalmente a ese hombre con todos sus<br />

conflictos? Porque no merece menos que eso. Todavía tiene que aprender límites, y<br />

pequeñas cosas como la empatía, y a ser menos controlador. Dice que ya no siente la<br />

compulsión de hacerme daño; quizá el doctor Flynn pueda arrojar algo de luz sobre<br />

eso.<br />

Fundamentalmente, eso es lo que más me preocupa: que necesite eso y que<br />

siempre haya encontrado mujeres afines que también lo necesitaban. Frunzo el ceño. Sí,<br />

esa es la seguridad que necesito. Quiero ser todas las cosas para este hombre, su Alfa<br />

y su Omega y todo lo que hay en medio, porque él lo es todo para mí.<br />

Espero que Flynn pueda contestar a todas mis preguntas, y quizá entonces<br />

podré decir que sí. Christian y yo encontraremos nuestro propio trozo de cielo cerca<br />

del sol.<br />

Contemplo el bullicio de Seattle a la hora de comer. Señora de Christian<br />

Grey… ¿quién lo iba a decir? Miro el reloj. ¡Oh, no! Me levanto de un salto y salgo<br />

corriendo hacia la puerta: llevo una hora entera sentada aquí… ¡qué rápido ha pasado<br />

el tiempo! ¡Jack se va a poner como una fiera!<br />

* * *<br />

Vuelvo sigilosamente a mi mesa. Por suerte, él no está en su despacho.<br />

Parece ser que me voy a librar. Miro fijamente la pantalla de mi ordenador, tratando de<br />

que mi mente se ponga en modo trabajo.<br />

—¿Dónde estabas?<br />

Pego un salto. Jack está detrás de mí con los brazos cruzados.<br />

—En el sótano, haciendo fotocopias —miento.<br />

Él aprieta los labios, que se convierten en una línea fina, inflexible.<br />

—A las seis y media tengo que salir para el aeropuerto. Necesito que te<br />

quedes hasta entonces.<br />

—De acuerdo.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!