24.06.2015 Views

segundo%20libro%20Cincuenta%20sombras%20oscuras

segundo%20libro%20Cincuenta%20sombras%20oscuras

segundo%20libro%20Cincuenta%20sombras%20oscuras

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

labios.<br />

—Eso ya no se considera un término psiquiátrico. No sé cuántas veces se lo<br />

he repetido a Christian. Ni siquiera se considera una parafilia desde los años noventa.<br />

El doctor Flynn ha conseguido que vuelva a perderme. Le miro y parpadeo.<br />

Él reacciona con una sonrisa amable.<br />

—Esa es mi cruz —afirma meneando la cabeza—. Simplemente Christian<br />

piensa lo peor en cualquier situación. Forma parte de ese aborrecimiento que siente<br />

por sí mismo. Por supuesto que existe el sadismo sexual, pero no es una enfermedad:<br />

es una opción vital. Y si se practica de forma segura, dentro de una relación sana y<br />

consentida entre adultos, no hay problema. Por lo que yo sé, todas las relaciones<br />

BDSM que ha mantenido Christian han sido así. Tú eres la primera amante que no lo ha<br />

consentido, de manera que está dispuesto a no hacerlo.<br />

¡Amante!<br />

—Pero seguramente no resulte tan sencillo.<br />

—¿Por qué no?<br />

El doctor Flynn se encoge de hombros con expresión afable.<br />

—Bien… las razones por las que lo hace.<br />

—Esa es la cuestión, Ana. En términos de la terapia breve centrada en<br />

soluciones, es así de simple. Christian quiere estar contigo. Para eso, tiene que<br />

renunciar a los aspectos más extremos de ese tipo de relación. Al fin y al cabo, lo que<br />

tú pides es razonable… ¿verdad?<br />

Me sonrojo. Sí, es razonable, ¿verdad?<br />

—Eso pienso yo. Pero me preocupa lo que piense él.<br />

—Christian lo ha admitido y ha actuado en consecuencia. Él no está loco.<br />

—El doctor Flynn suspira—. En resumen, no es un sádico, Ana. Es un joven brillante,<br />

airado y asustado, a quien al nacer le tocó una espantosa mano de cartas en la vida.<br />

Todos podemos golpearnos el pecho de indignación ante esa injusticia, y analizar hasta<br />

la extenuación el quién, el cómo y el porqué de todo ello; o Christian puede avanzar y<br />

decidir cómo quiere vivir de ahora en adelante. Había descubierto algo que le funcionó<br />

durante unos años, más o menos, pero desde que te conoció, ya no le funciona. Y en<br />

consecuencia, ha cambiado su modus operandi. Tú y yo tenemos que respetar su<br />

elección y apoyarle.<br />

Le miro confusa.<br />

—¿Y esa es mi garantía de tranquilidad?<br />

—La mejor posible, Ana. En esta vida no hay garantías. —Sonríe—. Y esta<br />

es mi opinión profesional.<br />

Le devuelvo una débil sonrisa. Bromas de médicos… vaya.<br />

—Pero él se considera una especie de alcohólico en rehabilitación.<br />

—Christian siempre pensará lo peor de sí mismo. Como he dicho, eso<br />

forma parte del aborrecimiento que siente por sí mismo. Es su carácter, pase lo que

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!