LA PUERTADE LA SABANAfoto: cortesía gobernación de cundinamarcaEl viaje soñadoHoy añoramos lo que alguna vez existió en las décadas de los cuarenta y cincuenta.La necesidad de un tren de cercanías es más que urgente para comunicar a Bogotácon 12 municipios, entre ellos Mosquera y Funza.Por OtonielUmañaMurgueitio*El tren, el metro o el tranvía es eltema de moda en los últimos 80años en la movilidad de Bogotá.Mi abuelo José Aniceto escuchó hablar* Periodista. Presentador de noticias del Canal Capital.52de sus maravillas en la década de lostreinta. Murió hace 32 años y hoy yo, con44, sigo creyendo que el famoso metro deBogotá se ha convertido en una utopía.Londres tiene la misma cantidadde habitantes y de kilómetros cuadradosque la capital colombiana. Si nofuera por su clima diría que es la ciudadperfecta. Pero su sistema de movilidadsí es casi perfecto.El turista encuentra en la capitalde Inglaterra más de 300 estacio-nes ferroviarias en todos los puntoscardinales. Pero más admirable aúnes el tren de cercanías que la conectacon los suburbios o pueblos cercanos.Incluso la red se extiende hastaEscocia. Las personas más pudientesde Londres viven en esos suburbios.Otras dejan los carros en sus casas yabordan este sistema masivo de transporte.El vehículo casi es exclusivopara salir de la ciudad en familia losfines de semana.
MOVILIDADSegún un proyectode la Gobernaciónde Cundinamarcade hace más decinco años, asíluciría el tren decercanías.red ferroviaria nohabría ese problemay el tiempo se reduciríaa 45 minutosen el más lejano delos casos”, aseguraRestrepo.OTRASVENTAJASEl sociólogo y abogadosostiene que otra de lasventajas de este sistema demovilidad está relacionadacon la expansión de la ciudad. Consideraque más bogotanos se animaríana vivir fuera de la capital, en condominioso casas campestres, si tuvierangarantizado un sistema de transporteque los acerque a la gran ciudad enpoco tiempo para llegar a sus trabajos,lugares de estudio o negocios. Sinduda, para él ese medio de transportees el tren de cercanías.Agrega que este factor traeríadiversos beneficios para la ciudad y laregión. Por ejemplo, dejar de construir80por ciento del tren ligero seríafinanciado por el sector privadoa través de una Alianza PúblicoPrivada. Según el Gobernador deCundinamarca, este proyecto seadjudicará en el primer semestrede 2015.obligatoriamente megaedificios paracumplir con las demandas de vivienda;reducir las tasas de violencia urbanaentre vecinos por la gran concentraciónde la población en un mismolugar; crear la verdadera ciudad-regióne integrar los municipios cercanos aBogotá que muchos reclaman. Y, porúltimo, descontaminar y mejorar elaire que respiramos por la menor cantidadde vehículos, entre otros.En Colombia muchas cosas sehacen al revés y paradójicamente hoyañoramos lo que alguna vez tuvimos.En las décadas de los cuarenta y cincuentalíneas férreas movilizaban lacarga desde la costa Pacífica hasta elcentro y norte del país. Acabamos conlos ferrocarriles para darles paso a laspesadas, costosas y lentas tractomulas,que son un dolor de cabeza en losprincipales corredores viales.Necesitamos ciudadanos queexijan mejores sistemas de movilidady calidad de vida, pero también periodistasy medios decomunicación quese pongan de sulado. Los recursoseconómicos siemprevan a estar ylas posibilidadesde construcciónson muchas.Llevamos décadasde alegres propuestasde los gobernantes deturno que no pasan del papel.Sin embargo, una obra como el trende cercanías será producto de lasdecisiones y las voluntades políticasque les han faltado a nuestros dirigentes,muchos de los cuales prometeny no cumplen. Y otros ni siquierase preocupan.Para 2030, cuando ya sean profesionalesy ojalá estén organizadas,espero que alguna de mis hijas, o ambas,me cumplan el sueño de ser abuelo. Loque no quisiera es que mis nietos mepregunten: “¿Qué pasó con el metro yel tren de cercanías del cual hablabas» Necesitamos ciudadanos queexijan mejores sistemas demovilidad y calidad de vidaMuchos, como el sociólogo yabogado Jairo Alberto Restrepo, consideranque ese tren de cercanías seríaaún más importante para una metrópolicomo Bogotá. Restrepo aseguraque se necesitan una o varias líneasférreas que unan a Bogotá con losmunicipios cercanos como Mosquera,Funza, Madrid, Facatativá, Tabio,Tenjo, Chía, Cajicá, Zipaquirá, Briceño,Sopó y La Calera.Su análisis es sencillo. Desdeesas 12 poblaciones llegan a Bogotáno menos de 250.000 personas diariamentepara trabajar, estudiar o hacersus negocios. Esto implica que algunosse desplazan lentamente en sus vehículos,para sumarse al caos de la movilidadde la gran ciudad. Y otros lo hacenen los buses intermunicipales, que losdejan a mitad de camino, para despuésbuscar cómo llegar a su destino. Esteviaje tarda no menos de dos horas parallegar al centro de la capital. “Con lae incluso escribiste una columna parauna de las publicaciones de la revistaSEMANA a finales de 2014? Todavíano vemos nada, abuelo”.ConexiónSabanaEsta conexión será un tren ligero que empezarásu recorrido en Facatativá, pasandopor la Estación de la Sabana, en Bogotá, yterminará en Soacha. Una Alianza PúblicoPrivada construirá y operará el sistema. Elsector privado financiará el 80 por ciento yel 20 por ciento restante estará a cargo delgobierno nacional y de la Gobernación deCundinamarca. En el mes de julio se presentaronlos estudios y los diseños y actualmentese están gestionando los recursos para suconstrucción. Según Álvaro Cruz, gobernardorde Cundinamarca, el proyecto se adjudicaráen el primer semestre de 2015.53