13.03.2013 Views

El Diario de Ana Frank

El Diario de Ana Frank

El Diario de Ana Frank

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

<strong>de</strong>recho a ser tomada en serio. Siempre he sido el payaso <strong>de</strong> la<br />

familia, constantemente se me trata <strong>de</strong> insoportable, siempre tengo<br />

que pagar el doble: primero al recibir las reprimendas, y luego<br />

por la forma en que son heridos mis sentimientos. Ya no puedo<br />

soportar ese aparente favoritismo. Espero <strong>de</strong> papá algo que él no<br />

es capaz <strong>de</strong> darme.<br />

No estoy celosa <strong>de</strong> Margot. No envidio su belleza ni su<br />

inteligencia. Todo cuanto pido es el cariño <strong>de</strong> papá, su afecto<br />

verda<strong>de</strong>ro no solamente a su niña, sino a <strong>Ana</strong>, al ser humano<br />

<strong>Ana</strong>.<br />

Me aferro a papá porque él es el único que mantiene en mí<br />

los últimos restos <strong>de</strong>l sentimiento familiar. Papá no quiere<br />

compren<strong>de</strong>r que, a veces, necesito <strong>de</strong>sahogarme respecto <strong>de</strong><br />

mamá; se niega a escucharme, evita todo cuanto se relaciona con<br />

los <strong>de</strong>fectos <strong>de</strong> ella.<br />

Más que todo lo <strong>de</strong>más, es mamá, con su carácter y sus faltas,<br />

quien pesa <strong>de</strong> modo terrible sobre mi corazón. Ya no sé qué<br />

actitud adoptar, no puedo <strong>de</strong>cirle brutalmente que es <strong>de</strong>sor<strong>de</strong>nada,<br />

sarcástica y dura..., y, sin embargo, no puedo soportar que siempre<br />

se me acuse.<br />

En todo somos distintas, y chocamos fatalmente. Yo no juzgo<br />

el carácter <strong>de</strong> mamá, porque no me correspon<strong>de</strong> juzgar; pero la<br />

comparo con la imagen que me he forjado. Y ella no es LA madre.<br />

Me es necesario, pues, cumplir yo misma con esa misión. Me he<br />

alejado <strong>de</strong> mis padres, bogo un poco a la <strong>de</strong>riva e ignoro cuál será<br />

mi puerto <strong>de</strong> salvación. Todo eso porque he concebido un ejemplo<br />

i<strong>de</strong>al <strong>de</strong> madre y esposa que en nada se asemeja a ella, a quien<br />

estoy obligada a llamar mamá.<br />

Siempre me propongo pasar por alto los <strong>de</strong>fectos <strong>de</strong> mamá,<br />

no ver más que sus cualida<strong>de</strong>s, y tratar <strong>de</strong> encontrar en mí lo que<br />

vanamente busco en ella. Más no lo he conseguido, y lo<br />

<strong>de</strong>sesperante es que ni papá ni mamá sospechan lo que me ocurre<br />

y yo los repruebo por eso. ¿Hay padres capaces <strong>de</strong> dar entera<br />

satisfacción a sus hijos?<br />

© Pehuén Editores, 2001.<br />

)28(<br />

EL DIARIO DE ANA FRANK<br />

En ocasiones se me ocurre que Dios quiere ponerme a<br />

prueba, no sólo ahora sino también más tar<strong>de</strong>: <strong>de</strong>bo hacerme<br />

buena mediante mi propio esfuerzo, sin ejemplos, con el fin <strong>de</strong><br />

ser más a<strong>de</strong>lante la más fuerte.<br />

¿Quién leerá estas cartas, si no yo? ¿Quién me consolará?<br />

Porque necesito a menudo consuelo; con mucha frecuencia me<br />

faltan las fuerzas, lo que hago no es suficiente. Y no realizo nada.<br />

No lo ignoro; trato <strong>de</strong> corregirme, y todos los días hay que<br />

empezar <strong>de</strong> nuevo.<br />

Me tratan <strong>de</strong> la manera más inesperada. Un día, <strong>Ana</strong> es la<br />

inteligencia misma y se pue<strong>de</strong> hablar <strong>de</strong> todo <strong>de</strong>lante <strong>de</strong> ella; al<br />

día siguiente, <strong>Ana</strong> es una pequeña ignorante que no compren<strong>de</strong><br />

nada <strong>de</strong> nada y que se imagina haber sacado <strong>de</strong> los libros cosas<br />

formidables. Ahora bien, ya no soy la niñita a quien se festeja con<br />

risas benévolas por cualquier motivo. Tengo mi i<strong>de</strong>al, es <strong>de</strong>cir,<br />

tengo varios; tengo i<strong>de</strong>as y proyectos, aunque todavía no pueda<br />

expresarlos. ¡Ah!, ¡cuántas cosas acu<strong>de</strong>n a mi mente <strong>de</strong> noche,<br />

cuando me quedo sola, obligada como estoy durante el día a<br />

soportar a quienes me fastidian, y se engañan sobre mis<br />

intenciones! Por eso vuelvo siempre a mi diario, que es para mí el<br />

principio y el fin, porque Kitty nunca pier<strong>de</strong> la paciencia; yo le<br />

prometo que, a pesar <strong>de</strong> todo, me mantendré firme, recorreré mi<br />

camino, y me trago las lágrimas. Pero, ¡cómo me agradaría ver un<br />

resultado, ser alentada, aunque solo fuera una vez, por alguien<br />

que me quisiera!<br />

No me reproches, recuerda que yo también puedo estar a<br />

veces a punto <strong>de</strong> estallar.<br />

Tuya,<br />

ANA

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!