¿MISION CUMPLIDA? EVALUACIÓN DEL PROGRAMA DE ... - Novib

¿Misión cumplida? Evaluación Programa ON-LAC
diferentes ritmos en los procesos sociopolíticos de ambas regiones. En Centroamérica y
Chiapas, la lucha por la vigencia de los derechos humanos y una institucionalidad
democrática con participación efectiva de la sociedad civil, se encuentra en un estadio
todavía más ‘crudo’ que en el sur. Los mismos actores de sociedad civil en Centroamérica y
Chiapas se han desarrollado con dificultades en los últimos veinte años, en relación con
estados que, por lo general, no han terminado de madurar institucionalmente.
Aunque la selección de la mayor parte de las organizaciones de la Meta 4 por parte de
Oxfam Novib haya ocurrido hace veinte o más años atrás, bajo el amparo de otras
estrategias y políticas, sus acciones y resultados siguen, en mayor o menor medida, los
supuestos de la teoría de cambio de Oxfam Novib. Es decir, las organizaciones no fueron
escogidas a partir de criterios que se desprendan de una estrategia formulada hace seis o
siete años, pero juegan dentro de su lógica. Este hecho podría estar señalando que la
lectura elaborada por Oxfam Novib sobre la realidad latinoamericana en este tema, ha
incorporado lecciones de la práctica de sus contrapartes de larga data, perspectivas y
abordajes que estaban siendo validados.
Desde el punto de vista de su perfil organizativo, en el portafolio de contrapartes destacan
aquellas organizaciones de amplia cobertura geográfica y poblacional, con un papel
preponderante en la generación de capacidades en Organizaciones de Base (OB), rurales y
urbanas. Por ejemplo, IBASE en Brasil, CIPCA en Bolivia y SERJUS en Guatemala. En Brasil,
se aprecia un apoyo más definido hacia organizaciones que integran a otras decenas de
ONG/OB más pequeñas. En Colombia, las contrapartes presentan un perfil sólido en
cabildeo e incidencia, sobre todo en relación con reformas legislativas y con la litigación de
casos tanto a nivel nacional como ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
El perfil predominante es el de ONG, definidas por la prestación de sus servicios (lo que no
excluye su posicionamiento político). Algunas, en particular aquellas dedicadas a los
derechos humanos, presentan un perfil que combina un componente de ONG con uno de
movimiento social, definido a partir de sus reivindicaciones. Lo anterior se ejemplifica con
el caso de GAM en Guatemala, la cual cuenta con bases sociales organizadas en los
territorios, integradas por víctimas de violaciones a los derechos y otros sectores
destinatarios de sus acciones. En Bolivia, específicamente en las organizaciones
relacionadas con los derechos humanos, los informes de evaluaciones dejan ver como
debilidad, que el abordaje centrado en derechos económicos y políticos presta menor
atención a los derechos sociales y culturales. Del mismo modo, se aprecian carencias en la
articulación de la dimensión de los derechos de los pueblos, tanto a nivel individual como
colectivo. Por el contrario, para Fray Bartolomé en Chiapas, estos son los aspectos
centrales de su trabajo.
Las organizaciones contrapartes son instituciones que cuentan con un promedio de
personal entre 40 y 60 personas, con una mayor presencia de mujeres entre el personal
como tendencia general. Se aprecia, a partir de los informes analizados, en las
organizaciones de Sudamérica una mayor complejidad organizativa y mayor solidez
institucional que las de Centroamérica, sustentadas sobre todo en una experiencia más
larga. Sin embargo, la mayoría de organizaciones presentan algunos rasgos comunes como
las dificultades para contar con un sistema de monitoreo, políticas de equidad genérica
institucionales y la sostenibilidad financiera.
La población meta de las organizaciones contrapartes en todos los países la conforman
sectores de población especialmente vulnerable, en relación con el ejercicio de sus
derechos y sus capacidades de participación social y política. Se destacan en su público
meta: comunidades y organizaciones campesinas e indígenas, grupos de víctimas de la
represión política pasada o actual, organizaciones de mujeres y organizaciones de barrios
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