11.07.2015 Views

libro espacios publicos - El Agora

libro espacios publicos - El Agora

libro espacios publicos - El Agora

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

F. Carrión: Espacio público: punto de partida para la alteridadEn otras palabras, expresa el tránsito de lo privado a lo público, caminodonde el individuo pierde su libertad, porque construye una instanciacolectiva en la cual se niega y aliena. 1De esta tercera posición surgen preguntas tales como: ¿por qué en lavida cotidiana se piensa que se sale de lo privado para entrar a lo público,y no al revés? O, en su defecto, ¿las fachadas de los edificios son el límitede lo privado o el umbral del espacio público? ¿La fachada pertenece alespacio público o al edificio privado? ¿Se pinta la fachada del espacioprivado o del público? 2 ¿Es el adentro o el afuera de cual de los dos <strong>espacios</strong>?Concepción alternativa<strong>El</strong> espacio público no es lo residual, tampoco una forma de apropiacióny menos un lugar donde se enajena de libertad. Se trata de superarestas concepciones, para empezar a entenderlo a partir de una doble consideracióninterrelacionada: por un lado, de su condición urbana y, por lotanto, de su relación con la ciudad; y, por otro, de su cualidad histórica,porque cambia con el tiempo y en cada momento tiene una lógica distinta,así como lo hace su articulación funcional con la ciudad. Originalmenteel espacio público puede cumplir, por ejemplo, una función mercantil(los grandes mercados indios llamados tianguis), posteriormente asumirun rol político (ágora) y luego predominantemente estética (monumento).Esta condición cambiante le permite tener múltiples y simultáneasfunciones que, en su conjunto, suman presente al pasado y van más alládel aquí y el ahora.Lo anterior también supone una relación entre la ciudad y el espaciopúblico que se especifica y transforma históricamente. Por ejemplo, si enun momento determinado el espacio público fue el eje de la organizaciónde la ciudad, hoy es más un espacio residual. De aquella ciudad organizadadesde el espacio público a la que hoy existe hay un verdadero abismo.Por ello se puede afirmar, sin temor a equivocación, que la plazaorganizadora de la ciudad es un producto urbano en vías de extinción.Dentro de las nuevas corrientes de la urbanización en América Latina, laplaza ha perdido funcionalidad y, con ello, estamos viviendo su forzosadesaparición. Hoy la ciudad se organiza desde lo privado, y ciertos <strong>espacios</strong>comunitarios —como las plazas— terminan siendo a la vez un desperdiciopara la lógica económica de la maximización de la ganancia, y811Espacios «destinados por su naturaleza, por su uso o afectación, a la satisfacción de lasnecesidades urbanas colectivas que trascienden, por tanto, los límites de los interesesindividuales de los habitantes» (León 1997).2En realidad cuando se pinta una fachada se define la frontera del espacio público, porquedesde allí se la ve y no desde el espacio privado. Por eso, la reglamentación de la fachadadebe dirigirse más hacia lo público (armonía, escala) que a lo privado, porque desde estaperspectiva el propietario lo único que busca es la individualidad.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!