ACTUALIDADÚBEDAXII Festival de Música AntiguaMÚSICA DE BATALLAÚbeda y Baeza. Auditorio del Hospital de Santiago de Úbeda. Auditorio de Las Ruinas de San Francisco, Iglesiasde Santa María del Alcázar y San Andrés de Baeza. 28, 29-XI, 5, 6, 7, 8-XII-2008. The Flanders Recorder Quartet.Orquesta Barroca de Sevilla. Olga Pitarch, soprano. Director: Manfredo Kraemer. Andrés Cea Galán, órgano. FormaAntiqva. Director: Aarón Zapico. The Tallis Scholars. Director: Peter Phillips. La Grande Chapelle. Coro de Cámaradel Festival. María Eugenia Boix, soprano; Marina Rodríguez Cusí, mezzosoprano; Juan Sancho, tenor; JonathanBrown, bajo. Director: Albert Recasens.36La dirección del Festivalde Música Antigua deÚbeda y Baeza, a cargodel inquieto y sagazmusicólogo Javier Marín,ha titulado su decimosegundaedición con el epígrafeSones de batalla en la claraintención de realzar el contenidode los dos ciclos mássignificativos de los siete desu programación, complementadoscon un curso deinvestigación organizado porla Universidad Internacionalde Andalucía AntonioMachado de Baeza. En estesentido, hay que destacar lagran expectación que supusola inclusión en la jornadade clausura de Un drama enmúsica del período napoleónicode Ramón Garay Álvarez(1761-1823), maestro decapilla de la Catedral de Jaéndesde 1787. La edición deeste “poema político-musical”ha sido efectuada porJuan Pablo Pacheco López,con la supervisión de PedroJiménez Cavallé de la Universidadde Jaén. La obra sigueel esquema de alternar arias,recitados y números coralesen los que la música persigue,en la mayoría de loscasos, reforzar el contenidodel texto que narra los principalesacontecimientos quese produjeron durante laGuerra de la IndependenciaEspañola. Albert Recasens,en poco tiempo, ha efectuadoun trabajo arduo en sumontaje en versión de concierto,intentando poner envalor un reiterado contenidomusical que refleja la sumisióndel autor a criterios desu época. La interpretaciónfue aseada en lo instrumentaly más destacada en lo vocal.Dos de los acontecimientosde esta edición han sidolos respectivos conciertos deThe Flanders Recorder Quartety The Tallis Scholars. EnÚBEDAel primer caso, la perfecciónestilística estuvo al serviciode un programa referido alos tiempos revueltos de lareina Isabel la Católica conobras de Isaac, Obrecht,Agricola y Desprez entreotros autores. En nuestraépoca, la flauta dulce hasido elevada por este cuartetoa una importancia de primerrango. Su sugestiva imitaciónde la voz humana ysu aproximación al sonidode un órgano positivo sonejemplos palmarios delenorme arte de estos grandesmúsicos. Igual consideracióncabe aplicarse a cadauno de los componentes deThe Tallis Scholars. En sutreinta y cinco años de historia,se han mantenido en lacumbre del estrellato de lamúsica vocal renacentista. Sufundador, Peter Phillips, cuidaal máximo la selección devoces, lo que le permitelograr siempre el mayordetalle de las distintas líneasmusicales. La interpretaciónde la Missa Batalla (a 6voces) del mejicano FranciscoLópez Capillas (1614-1674) fue un prodigio deconjunción, transparenciaTHE TALLIS SCHOLARSvocal y elevación espiritual,cualidad ésta que alcanzó sumáxima expresión en laspiezas de Tomás Luis de Victoriay Francisco de Guerreroque, con un preciosomotete de Alonso Lobo, ocuparonla segunda parte delprograma. La perfecciónartística de este grupo y elentusiasmo con el que lomaneja Phillips cautivaron alpúblico que llenaba el auditorio.Excelsa velada en lahistoria del festival.Con el título Una miradaal siglo XVIII, la OrquestaBarroca de Sevilla se presentababajo la dirección deManfredo Kraemer, interpretandoautores catalanescomo Doménec Terradellas(1713-1751) y Carlos Baguer(1768-1808) y dos preciosaspiezas de Boccherini. Elbuen momento de la orquesta,impregnada del saberestilístico del violinistabonaerense, permitió el lucimientode la soprano OlgaPitarch en el aria Non ti moroallato del compositor luqués.Con la intención de provocarcuriosidad en el auditorio, laformación Forma Antiqva sepresentaba con una selecciónmusical que hacía referenciaa los tercios españolescon el título Resuene el orbe,donde aparecían autorescomo Cabezón, Valente,Banchieri, Aguilera de Heredia,Correa de Arauxo, Ucellini,Bruna y Falconieri. Lodeslavazado del programa yun cierto desenfado llevaronal público a una embaídadiversión ya que, intencionadamente,no se pretendíamayor trascendencia. Sí latuvo el conjunto de Festival,que en cada edición se consolidacomo una de las citasanuales más importantes enla recuperación de patrimoniomusical servido con convencimientoen lo científicoy en lo artístico, aspectosmuy tenidos en cuenta porAndrés Cea en el órganomejor conservado de la provinciade Jaén, sito en el templocopatronal de Baeza, conun recital titulado Los clarinesde la fama, en el quedestacó la Batalla famosa deautor anónimo recogida enla colección Flores de músicade fray Antonio Martín y Collen 1706.José Antonio Cantón
ACTUALIDADVALENCIANuevo acierto del Palau de les ArtsDOMINGO SIGUE ADMIRANDOPalau de les Arts. 3-XII-2008. Gluck, Iphigénie en Tauride. Violeta Urmana, Riccardo Zanellato, Plácido Domingo,Ismael Jordi, Amparo Navarro. Coro de Cámara Amalthea. Orquesta de la Comunidad Valenciana. Director musical:Patrick Fournillier. Director de escena: Stephen Wadsworth.Violeta Urmana y Plácido Domingo en Iphigénie en Tauride de Gluck en el Palau de les Arts de ValenciaCon Iphigénie en Tauride,el título en principiocon menos ganchopopular de los programados,Les Arts ha obtenidootro éxito formidable enuna temporada hasta ahoracon muy pocos motivos parael reproche, por más quealguno haya resultado muyllamativo.El montaje se estrenó enel Metropolitan el año pasado(véase SCHERZO nº 226,pág. 50). Siendo impresionante,proyecta constantementela atención sobre eltexto, la música o ambascosas. El decorado de ThomasLynch lo parte en dosun muro que alternativamentesepara y comunica.En la dirección de escenade Stephen Wadsworth,aquí a cargo de Sarah Schinasiy Daniel Pelzig, no hayVALENCIAun solo movimiento ni gesto,ni de los cantantes ni delos comparsas, que no seinserte con ajustado sentidocontextualizador, y NeilPeter Jampolis pensó y BrunoCiuli consigue iluminarlos bonitos figurines deMartin Pakledinaz con sensibleimaginación. Además,por fin se ha podido versobre este escenario unacoreografía, de Daniel Pelzig,exigente en su concepcióny realizada de manerasobresaliente.Por presencia, hermosocolor vocal, impresionantesfacultades y línea de notabilísimacondición lírica, la Ifigeniade Violeta Urmana fuetan relevante como suKundry de menos de un parde meses antes. No en latesitura de barítono, sino enla de tenor dispuesta porGluck para la revisión vienesa,Plácido Domingo compusoun Orestes de máximaintensidad que ya habríaadmirado mucho hace dosdécadas, cuánto más considerandoque quien conservaun timbre tan fresco y redondoes un cantante próximo ala setentena. Excelente estuvoigualmente el joven peroya muy maduro Ismael Jordicomo Pílades, que si acabade desentubar la columnade aire tiene calidad y musicalidadmás que suficientespara convertirse en una primerafigura mundial. En susmás breves cometidos nodesmerecieron sino todo locontrario Riccardo Zanellato,Thoas malvado pero sincaricatura, sino bellamentecantado desde la comprensiónde su cruel intransigencia,ni Amparo Navarrocomo diva ex machina.Otro pilar fundamentalpara el triunfo lo aportó elCoro de Cámara Amalthea:desde luego como escitas ycomo furias, pero sobretodo la sección femenina enlos pasajes más suaves, susmiembros encontraron unnivel de empaste y un tonoexpresivo de parejo atractivo.En último pero nomenos importante lugar, laorquesta respondió conpulcritud y exactitud a lasindicaciones siempre oportunasde un Patrick Fournillierque supo cuidar conmimo a las voces y lograrde sus instrumentistas losgrados de levedad sonora osolemnidad rotunda quealternativamente demandala partitura.Alfredo Brotons Muñoz37