LIBRO SEGUNDO - Bicentenario

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Pam Ilegar a ellos, para ocupar aquellas curules, para ungirse
padre de )a Patria y cubrirse con el manto augusto del fuero constitucional.
era innecesario recurrir a los comicios: bastaba tener el
voto del Gran Elector: del general Diaz. 91 seleccionaba a sus protegidos
o a los protegidos de sus Intimos; y despu4s de asegurarse
de su incondicionalismo, de su docilidad y disciplina, y del sacrificio
voluntario que hacian de toda iniciativa personal, los hacia senadores
o diputados.
De euando en cuando se introdLICia cen ]a caballuda> (1) alguno
que resultaba indisciplinado y nervioso. El suceso casi producia una
crisis, y el atrevido o deslenguado, si no era posible su inmediata
eliminaci6n, sabia perfect q mente quo estabR decretada su muerte
civil. 4 Se era diputado o senador pam ver, oir, callar y votar come,
lo ordenaba el seflor President".
Tambie'n, en alganas ocasiones, el amo concedia libertad de v(>to
y de neci6n. Era en aquellos asuntos de ninguna relaci6n politi.
ca, verdaderamente anodinos, que s6lo tenfan importancia doctrinaria,
que jamil)IS dicron resultados pra'cticos y que producian passjeras
algaradas parlamentarias, con )as cuales pretendia cubrir Ins
apariencias para dar colorido y remedo de ccuerpos legisladores^ a
sus grandes agrupaciones de inxitiles.
Los C-ongresos do ]a Uni6n que asi laboraron Ilevar sobre si gmmdes
responsabilidades quo depurar: todos ellos, segdn frase de Bulnes,
4 .... en Ins orgias de ]a tirania escanciaron sin tasa ni reparo
el vino de Lesbos, colmando ]a copa del dictador.. ..^
Examinemos separada y detalladamente lo que fueron aquellos
qSenados- y eCimams do Diputados^.
El Senado fue el asilo do todos los fracasados de la politica porfiriana;
^los Invitlidosi- de los gobernRdores depuestos, de los geDemles
removidos del mando de zonas, de los magistrados de In Corte
nauf ragados 3, de las estantiguas que no tenian cabida posible en
ninguna parte. Allf fuerona dar: Curiel, Ar6chiga, Morfin, Cahuantzi,
Lauro Carrillo, Martinez Arredondo, L6pez Garrido y tantos
mas; alli so reunicron: Ortegay Reyes, SebastiAn Carnacho, Mance-
(1) El general Diaz, eu algona ovasi6n en que rehue6 hacer diputado
a una persona de reconocida independencia de rarfict-cr, dijo de un mr,do cho.
carrero: -'No, porque ese rne va a alborotar la caballada."