La Leyenda del Caballero Sol – Libro 1 (V

estaba completamente cubierto – ¿Qué más podía hacer a este
punto?
Como ya no había nada más que pueda hacer, ¡Debería
cerrar mis ojos y esperar hasta que este momento se pase!
“¡Wow! ¡Woow! ¡Sol tienes un físico increíble, tal
como lo esperaba!” La sorprendida exclamación de Pink llegó
hasta mis orejas.
¿Qué? ¿Qué tengo un asombroso físico? ¡No me digan
que estoy desnudo!
Rápidamente abrí mis ojos y miré hacia abajo. Por
suerte, no vi nada de piel desnuda. Por otra parte, mi ropa había
cambiado a una malla negra bien ajustada al cuerpo la cual
revelaba todo sin necesidad de que este desnudo… Con razón
Pink dijo que mi físico era muy bueno.
Esta malla ajustada tenía el brillo de una luz plateada.
Había armadura plateada en los puntos vitales como en mi
pecho y la parte baja de mi cuerpo, e incluso el calzado en mi
pie también se convirtió en un par de botas plateadas. Cuando
examiné la liviana armadura más de cerca, vi que de hecho
estaba conformado por escamas del tamaño de una uña de dedo,
haciendo que mi movilidad no tenga ninguna dificultad en lo
absoluto.
“Esta cosa sí que es de alta calidad…” No pude
detenerme de suspirar en admiración, pero mientras suspiraba,
me di cuenta que mi voz había cambiado también. No
exactamente cambiado, pero era como si estuviera hablando a
través de algo.
Pensé que era extraño, así que me toque la cara, y luego
me di cuenta que la parte baja de mi rostro estaba cubierta por
una delgada pieza de la armadura también.
Lleno de curiosidad, caminé al frente del único espejo
de la casa. Miré y vi que el hombre que me miraba de vuelta
estaba vistiendo una ajustada malla, con escamas plateadas
cubriendo la parte baja de la cara, puntos vitales y el pie, los
cuales todos brillaban con un resplandor. Toda la apariencia era
extremadamente genial y apuesta, especialmente cuando estaba
combinada con una cabellera negra con rayas plateadas. Se
podría decir que esta apuesta imagen podría robarse el corazón
de cualquier mujer de ocho a ochenta años… Esperen, ¡Esperen
un minuto! ¡¿Cabello negro con rayas plateadas?!
Estaba fuera de mí.
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