La Leyenda del Caballero Sol – Libro 1 (V
La Leyenda del Caballero Sol – Libro 1 (V
La Leyenda del Caballero Sol – Libro 1 (V
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
Mirando a Fuego, noté que él no parecía haberse<br />
percatado de que algo andaba mal con el <strong>Caballero</strong> de la<br />
Muerte. Más bien, este sutil cambio en el aura oscura era algo<br />
que solo yo podía ver; algo que solo el <strong>Caballero</strong> <strong>Sol</strong>, quien<br />
tiene atributos santos al cien por ciento, podía sentir. ¡Qué mala<br />
suerte! Tengo que encontrar un modo de avisar a Fuego.<br />
Pensándolo otra vez, pensé que era mejor simplemente<br />
unirme a la batalla directamente. En el peor de los casos, podría<br />
escapar corriendo sin tomar responsabilidad después de eso.<br />
Justo cuando estaba por desenvainar mí Sagrada Espada<br />
<strong>del</strong> <strong>Sol</strong>… ¡De donde voy a sacar mi Sagrada Espada <strong>del</strong> <strong>Sol</strong>!<br />
Miré por todo mi cuerpo, y mi físico realmente no estaba mal…<br />
¡Ajem! En resumen, estaba vistiendo una malla en mi cuerpo,<br />
así que no pude ver ningún lugar en el que podía esconder<br />
armas.<br />
¿Saltar hacia la batalla desarmado? Fuego podría<br />
solamente pensar que estoy estorbando, y decirme que me vaya<br />
a un lado a tomar leche.<br />
‘Mi señor, su sirviente puede proveerle de armas.’<br />
“¿En serio?” Extendí mi mano felizmente. “Entonces<br />
dame una ¡Rápido!”<br />
‘Mi señor, su sirviente tiene la obligación de recordarle<br />
que el arma debe ser intercambiado por 200ml de sangre.’<br />
“¿Esto es un robo a plena luz <strong>del</strong> día? ¿Que necesitas<br />
chupar mi sangre solo para darme una arma?” Pregunté<br />
asombrado, “¡Eres un monstruo de corazón negro! Grrr…<br />
¡Esperen! ¡Tú no tienes corazón! ¡‘Traje negro’!”<br />
‘Mi señor, su sirviente es de hecho una traje negro.’<br />
Estaba tan furioso que estaba rechinando mis dientes.<br />
Sin embargo, al bajar mi cabeza, vi que aunque el <strong>Caballero</strong> de<br />
la Muerte estaba siendo acechado y las heridas de su cuerpo<br />
estaban incrementando poco a poco, el aura oscura que lo<br />
rodeaba estaba tan espesa como la tinta. Incluso Fuego se dio<br />
cuenta de que algo andaba mal. Su expresión mostraba duda y<br />
ansiedad, pero parecía que él no tenía intenciones de retractarse.<br />
Gorila idiota, ¿A dónde se fueron todas mis advertencias?<br />
¿Qué no te dije que era mejor retractarse a tercamente forzarte a<br />
ti mismo?<br />
Sin tener más opción, solo pude gritar a la traje,<br />
“¡Apresúrate y dame un arma!”<br />
‘Si mi señor.’<br />
† 117 †