Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
correspondido, pero más que todo toca la fibra de ese pueblo,<br />
cuando cantor y bandoneón se juntan para entre canto y<br />
melodía hablarle de sus penas, de su amargura, de su<br />
pobreza. Es por ello que se le llama tango arrabalero, porque<br />
brotó del barrio, nació en el arrabal. Sin embargo, a pesar del<br />
gran arraigo que tuvo y que aún después de tantos años<br />
sigue teniendo en algunas regiones de Latinoamérica, fue<br />
después de mucho tiempo que las élites de las clases<br />
adineradas lo aceptaron, porque estas lo consideraban<br />
"vulgar". Tal vez, digo yo, si hubiese nacido en el seno de esa<br />
sociedad, el calificativo hubiese sido otro. Esta es otra faceta<br />
que también se fue, y que difícilmente retornará, de aquel<br />
San Sebastián de ayer que repito, poco a poco se está yendo.<br />
Se nos fueron también los serenateros que marcaron pauta<br />
en aquella época y que enmarcados en un género musical,<br />
compuesto de guitarras, maracas y cantores, sirvieron entre<br />
otras cosas para que a través de aquellas serenatas, se<br />
acrecentara el dolor en algunos enamorados, pero en otros<br />
casos lograban la reconciliación entre parejas que<br />
permanecían separadas, inclusive hasta unir a personas en<br />
matrimonio. Por ejemplo, muchas veces ocurrió que un<br />
elemento víctima del amor, atormentado con un tremendo<br />
despecho, concertaba a estos serenateros y con ellos llevaba<br />
una serenata a su enamorada, quien por motivo de celos,<br />
90