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semana, prácticamente no hubo comentarios en el entorno de Vázquez. Sólo quebró el<br />
silencio el ministro de Medio Ambiente uruguayo, Mariano Arana, al considerar que el último<br />
informe del Banco Mundial “resultó altamente satisfactorio” y “ratifica que las alarmas<br />
públicas que se han generado carecen de fundamento”.<br />
© Página 12, 17 de abril de 2006.<br />
Los autores que hemos venido presentando han sido testigos de las<br />
consecuencias tanto de la Revolución Francesa como de los cambios<br />
tecnológicos englobados en las dos Revoluciones Industriales. Pero las<br />
consecuencias sociales de esta “doble revolución” fueron percibidas de un<br />
modo contradictorio y esto se plasmó en sus teorías. Por una parte, descreen<br />
de la posibilidad de un retorno al mundo religioso con sus dogmas<br />
incuestionables y por lo tanto se muestran optimistas respecto del papel que la<br />
ciencia puede desempeñar; pero a la vez, hay en su lectura de la realidad una<br />
profunda nostalgia del orden perdido, la idea de que hay “algo que se ha roto”<br />
desencadenando una situación caótica difícil de manejar y reencauzar.<br />
OPTIMISMO NOSTALGIA<br />
Confianza en por el orden perdido<br />
la ciencia<br />
Suponen que su trabajo como sociólogos consistiría en “descubrir” leyes de<br />
funcionamiento de la sociedad y así describir los hechos tal como suceden en la<br />
realidad. Esto los llevará a adoptar el método de las ciencias naturales para<br />
explicar los fenómenos sociales y es por ello que, retomando lo visto al inicio de<br />
la unidad, diremos que se trata de una sociología positivista.<br />
Será hacia fines del siglo XIX cuando se produzca una definitiva ruptura en la<br />
imagen de la sociedad hasta ese momento marcada por esta tensión entre la<br />
visión optimista del progreso y el pesimismo conservador que idealizaba la<br />
armonía de épocas anteriores.<br />
El escenario de las últimas décadas del siglo XIX presenta ante todo un nuevo<br />
protagonista: las masas de obreros industriales de las ciudades. Desplazadas<br />
hacia las urbes buscando trabajo en las nuevas fábricas, en duras condiciones<br />
de pobreza y marginalidad, comenzarán a encontrar hacia fines del siglo, nuevas<br />
formas organizativas como los sindicatos y los partidos socialistas.<br />
Esta creciente organización del incipiente movimiento obrero permitirá, por una<br />
parte, mediante sus órganos de difusión, como periódicos, informes y otras<br />
36<br />
Eliminado: Cita:<br />
Con formato: Fuente:<br />
(Predeterminado) Tahoma, 10<br />
pt<br />
Eliminado: Fin txt. Para leer,<br />
fin Actividad<br />
<br />
Txt. Ppal.<br />
Eliminado: Esquema<br />
Eliminado: <br />
Eliminado: Txt. Ppal.<br />
Eliminado: Nota para diseño:<br />
fotos/ilustraciones de la 2da<br />
rev. Industrial: fábircas,<br />
obreros, gente con frio en las<br />
calles…