FEDRO.

Convengo en ello.
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FEDRO.
SÓCRATES.
Si triunfa el escrito, el autor sale del teatro lleno de
' gozo; si se le desecha, queda privado del honor de que
sele cuente entre los escritores y autores de discursos, y
así se desconsuela y sus amigos se afligen con él.
Sin duda.
FEDRO. .
SÓCRATES.
Es evidente que, lejos de desdeñar este oficio, le tienen
en gran estimación.
Convengo en ello.
FEDRO.
SÓCRATES.
¿Pero qué? cuando un orador ó un rey, revestido del
poder de un Licurgo, de un Solón, de un Darío, se inmortaliza
en un Estado, como autor de discursos, no se mira
á sí mismo, como un semi-dios durante su vida, y la posteridad
no tiene de él la misma opinión, en consideración á
sus escritos?
Seguramente.
FEDRO.
SÓCRATES.
Crees tú, que ningún hombre de Estado, cualesquiera
que sean su carácter y su prevención contra Lisias, pretenda
hacerle ruborizar por su título de escritor?
FEDRO.
No es probable, conforme á lo que dices, porque seria
á mi parecer difamar su propia pasión.
SÓCRATES.
Por lo tanto, es evidente que nadie puede avergonzarse
de componer discursos.
Conforme.
FEDRO.
Platón, Obras completas, edición de Patricio de Azcárate, tomo 2, Madrid 1871