El Protagonismo de las Materias Primas - Fundación Banco Santander
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EL DESARROLLO EN LOS PAÍSES EMERGENTES: AMÉRICA LATINA Y ASIA<br />
necesidad <strong>de</strong> conce<strong>de</strong>r crédito al sector privado a tipos <strong>de</strong><br />
interés que reflejen la mayor estabilidad macro y una menor<br />
prima <strong>de</strong> riesgo sistémico. Esta situación es <strong>de</strong>terminante<br />
para América Latina y, <strong>de</strong>safortunadamente, la región no ha<br />
sabido hasta ahora explotar ante la comunidad internacional<br />
el valor real <strong>de</strong> esta excepcional ventaja competitiva. En<br />
concreto, yo creo que la mejor ventaja competitiva <strong>de</strong><br />
América Latina frente a China es que, por primera vez en su<br />
historia, la región tiene sistemas bancarios sólidos que<br />
pue<strong>de</strong>n intermediar el ahorro que se está generando en sus<br />
ciudadanos. Por primera vez, América Latina tiene un<br />
sistema financiero en el que un tercio <strong>de</strong>l total <strong>de</strong>l sistema<br />
está en manos <strong>de</strong> grupos internacionales 2 . Y <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> los<br />
bancos nacionales, también se han <strong>de</strong>cantado ya los<br />
“campeones nacionales” –bancos como Itaú, Bra<strong>de</strong>sco,<br />
<strong>Banco</strong> <strong>de</strong> Chile, <strong>Banco</strong> Popular, etc.– que han resultado ser<br />
unos formidables competidores y unas instituciones que no<br />
tienen nada que envidiar a <strong>las</strong> <strong>de</strong>l mundo <strong>de</strong>sarrollado. Los<br />
sistemas bancarios <strong>de</strong> la región están, a<strong>de</strong>más, bien regulados,<br />
patrimonialmente sobrados <strong>de</strong> capital y muy bien<br />
posicionados para “fon<strong>de</strong>ar” su crecimiento con el aumento<br />
que se está produciendo <strong>de</strong> la tasa <strong>de</strong> ahorro.<br />
Lo anterior no es voluntarismo. Es reflejo <strong>de</strong> lo que está ya<br />
pasando. En los últimos veinticuatro meses, el crédito<br />
bancario en América Latina se ha ido acelerando hasta<br />
situarse hoy en tasas <strong>de</strong> crecimiento en torno al 20%,<br />
mientras que el ahorro bancario aumenta a tasas en torno<br />
al 17%. Estamos, pues, en una situación macro-financiera<br />
inmejorable para que los sistemas bancarios <strong>de</strong> la región<br />
puedan financiar <strong>las</strong> necesida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> inversión adicional que<br />
tiene el continente. Financiar domésticamente, y no en los<br />
mercados internacionales. Invertir no en proyectos <strong>de</strong>l<br />
sector público o <strong>de</strong> los Estados soberanos, sino en empresas<br />
privadas, preferentemente posicionadas en el sector <strong>de</strong><br />
bienes comerciables <strong>de</strong> <strong>las</strong> economías.<br />
2. City, HSBC, BanK of America, ABN Amro, BBVA y Santan<strong>de</strong>r.<br />
La inserción <strong>de</strong> Latinoamérica<br />
en la economía mundial:<br />
evitad los <strong>de</strong>ja vues<br />
La inserción <strong>de</strong> América Latina en el mundo tradicionalmente<br />
ha sido tan compleja que jamás ha culminado. Regularmente, la<br />
región –o alguno <strong>de</strong> sus países simbólicos– ha tratado <strong>de</strong> forjar<br />
una asociación con alguno –o algunos países– <strong>de</strong>sarrollados<br />
que no ha llegado a buen puerto. Es muy comprensible que<br />
en la región haya resquemores y que, en los últimos años, se<br />
haya tratado <strong>de</strong> buscar la asociación <strong>de</strong> países emergentes<br />
–Mercosur, APEC, etc.– y eso aunque los resultados hasta<br />
ahora obtenidos tampoco hayan sido espectaculares.<br />
La emergencia <strong>de</strong> China e India parece estar dando lugar a una<br />
“tercera vía” al enfoque <strong>de</strong> inserción latinoamericano. La visión<br />
que ahora parece ser la favorecida es subrayar que América<br />
Latina pue<strong>de</strong> encontrar su papel haciendo <strong>de</strong> triangulador<br />
entre la economía mundial y China. Según esta visión, América<br />
Latina podría ser el gran suministrador <strong>de</strong> materias primas a<br />
China y, con los resultados y los recursos que obtenga <strong>de</strong> esas<br />
ventas <strong>de</strong> largo plazo, la región podría diversificar su estrategia<br />
<strong>de</strong> inserción en la economía mundial. Quizá. Pero no es una<br />
visión innovadora.<br />
La región –algún país <strong>de</strong> la región– ha ensayado antes este<br />
papel. Esto es el mo<strong>de</strong>lo <strong>de</strong> asociación <strong>de</strong>l Reino Unido y<br />
Argentina <strong>de</strong> principios <strong>de</strong>l siglo XX. Y conocemos los resultados.<br />
<strong>El</strong> Reino Unido llegó a suponer en 1930 el 30% <strong>de</strong> <strong>las</strong><br />
exportaciones totales argentinas y en ese año el 60% <strong>de</strong> la<br />
inversión directa que recibía Argentina se generaba en el Reino<br />
Unido. Es más, aproximadamente un cuarto <strong>de</strong> todos los activos<br />
que el Reino Unido tenía invertidos en el mundo estaban<br />
localizados en Argentina. Es <strong>de</strong>cir, entre los dos países había lo<br />
que hoy, cualquier consultor <strong>de</strong> medio pelo, llamaría “une tres<br />
gran<strong>de</strong> alliance estrategique”.<br />
Aquella experiencia terminó francamente mal. A partir <strong>de</strong><br />
1930, la suspensión <strong>de</strong>l sistema <strong>de</strong> preferencias imperiales y el<br />
“incorrecto” alineamiento político <strong>de</strong> Argentina cambiaron el