82<strong>Cuaderno</strong>s <strong>Descentralista</strong>s <strong>16</strong>V. BALANCE DEL PROCESO DETRANSFERENCIA DE LOS PROGRAMASSOCIALESHasta el momento, el proceso de transferenciade programas sociales no ha modificadosino ampliado la separación de política económicay política social entre los sectores Saludy Educación, y los programas de luchacontra la pobreza. La desarticulación en materiade tiempo y niveles de gobierno en losque se está haciendo la transferencia contribuyea ello. Esto se puede ilustrar con el irrelevantepapel que cumplen los gobiernos regionalesen la transferencia de los programasde complementación alimentaria y los proyectosde infraestructura social y productiva alos gobiernos provinciales y distritales respectivamente.Se aprecia también en la extremadamenterígida separación de competenciasentre lo productivo —Gobierno Regional— ylo social —gobiernos locales—, pues no se establecenlas articulaciones ni los tiempos delos programas de lucha contra la pobrezacomo parte de los objetivos sociales de unaestrategia de desarrollo integral para la región.No hay una redefinición de las políticassociales; estas se siguen moviendo dentro delos parámetros con los que operaban en elmarco de un modelo neoliberal que no hacambiado en lo sustantivo. Si bien es necesarioreconocer que la transferencia de los proyectosde infraestructura social y productivade FONCODES a los municipios distritalesdenota que así se les devuelve una de sus funcionesmás reconocidas por las autoridades ypor la población, en el caso de los programasde complementación alimentaria, que no tienenen el PRONAA una rectoría clara, latransferencia podría simplemente atomizarrecursos sin objetivos de impacto claramentedefinidos.Una pregunta, no respondida hasta elmomento, es por qué se empezó la descentralizacióncon la transferencia de los programassociales de lucha contra la pobreza a losgobiernos provinciales y distritales, cuando sepudo haber comenzado por fortalecer a losrecién formados gobiernos regionales paratransferirles competencias y funciones de lossectores Salud (nutrición) y Educación 1 y, deacuerdo con ellas, ubicar las otras transferencias.Más aún cuando, de manera paralela, elMIMDES, ente rector de los programas sociales,entró en un proceso de reestructuraciónformalmente concluido a fines de 2004 y queen la actualidad se encuentra en proceso deimplementación; y, además, en un contextoen el que el MIMDES soporta la presión deorganismos financieros internacionales y delMEF para el rediseño de los programasalimentarios.Es importante, entonces, analizar cómose están dando las transferencias, porquepuede ser que el proceso traiga repercusionesindeseables en perjuicio de los beneficiarios ylas organizaciones sociales de base (OSB) queparticipan en los programas sociales. En particular,es necesario hacerle el seguimiento a1 En otros países (Nicaragua, Bolivia y otros) se ha empezado así el proceso de descentralización.
MARÍA JOSEFINA HUAMÁNlos mecanismos de participación ciudadanaque acompañan al proceso de transferenciasy, de esta manera, asegurar su efectividad.La descentralización puede agravar la fragmentaciónde los programas sociales, particularmenteen el caso de los programas decomplementación alimentaria del PRONAA.La simpleza o la complejidad del procesoA los municipios distritales se les transfierenlos proyectos de infraestructura social y productivadel FONCODES. La ejecución deobras no es una tarea nueva para los municipios,sino, al contrario, una función típicamentemunicipal, de modo que no deberíahaber sido más compleja que la transferenciade recursos, aunque tal vez resulta un pococomplicada para municipios rurales ubicadosen zonas de mayor pobreza y cuyas limitacionesno provienen de su condición de municipiosdistritales, sino de la escasez de recursos.Situación que no hubiese sucedido siFONCODES se hubiese ocupado de fortalecerlos.Los programas de complementaciónalimentaria, en cambio, sí son nuevos paralos municipios provinciales. Ellos no tienenuna experiencia similar de referencia a la cualapelar; la más cercana es el Programa delVaso de Leche que se ejecuta en el ámbitodistrital. En sí, no se trata de un programacomplejo, porque consiste básicamente encomprar y distribuir alimentos, y es ejecutadode manera centralizada; ahora se lo quiereaplicar a escala provincial.83La transferencia de los programas decomplementación alimentaria está siendomás compleja de lo que podría ser, por razonescomo: (i) Los municipios provinciales noasociaron descentralización con reparto dealimentos; por lo tanto, no estaba dentro desus planes de gobierno asumir los problemasni los programas alimentarios y nutricionales.Menos aún, estuvieron a la expectativa deprepararse para su transferencia. (ii) Los gobiernosprovinciales no estaban gestionandolos programas de apoyo alimentario. Desde1994, el Programa del Vaso de Leche pasó ala administración de las municipalidadesdistritales. (iii) Inicialmente se planificó transferirrecursos solo para la compra de alimentosy no para los gastos operativos y administrativos,que no estaban previstos en el presupuestomunicipal y que los desanimó derecibirlos, pues les ocasionaban más gasto ymás riesgos en relación con su comunidad.(iv) A excepción de la provincia de Lima Metropolitana,los programas de apoyo alimentarioa los comedores populares no tienengran peso ni importancia en términos denúmero de comedores ni de beneficiarios. (v)El modelo «Comedor Popular» es heterogéneo:lo que es un «comedor popular» difierede provincia a provincia, entre otras cosasporque el Estado, bajo esa denominación, haincorporado diversas modalidades, sobre todoen zonas rurales. (vi) El PRONAA se organizóen unidades operativas con un criterio deaccesibilidad geográfica, y no de delimitaciónpolítica como departamentos y provincias.(vii) El mayor volumen de alimentos compradospor el PRONAA fue realizado de maneracentralizada, en función de lo cual organizósu logística, esquema que es difícil de rompero que hay que recrear a escala provincial.(viii) En el nuevo contexto, el MIMDES encontróargumentos para justificar la validezde la transferencia. Así surgieron varios: porun lado, la reactivación del agro (que no resultó);y, por otro, la participación de lasmujeres, y, posteriormente, la seguridadalimentaria y los objetivos nutricionales. (ix)La transferencia se está dando en un contextode crítica y presión desde organismosmultilaterales, como el BM y el BID, para queestos desaparezcan y sean reemplazados portrasferencias directas condicionadas. (x) Lacrítica al Programa del Vaso de Leche se hahecho extensiva mecánicamente a los programasde complementación alimentaria, a losque se les han atribuido objetivos nutricionalesque nunca se plantearon y se los ha descalificadoporque la desnutrición crónica no hadisminuido en los últimos años.Por otro lado, el imaginario de la poblaciónha tendido a identificar la transferenciade los programas sociales con los programasde complementación alimentaria y, en muchomenor grado, con la transferencia de losproyectos de infraestructura social deFONCODES. Por ello, lo que ha estado endebate, lo que se ha discutido y lo que se ha