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256 NOVELAS EXEMPLARES
tigo que la voluntad diuina quiere dar a los que
en ella no ponen del todo en todo sus desseos
y esperangas, no es mucho que yo quede defraudado
en las mias, y que yo mismo aya sido
5 el fabricador del veneno que me va quitando
la vida. Pero porque veo la suspensión en que
todos estays, colgados de las palabras de mi
boca, quiero concluyr los (1) largos preámbulos
desta platica, con deziros en vna palabra lo que
10 no es possible dezirse en millares dellas. Digo,
pues, señores, que todo lo que he dicho y hecho
ha parado en que esta madrugada hallé a esta,
nacida en el mundo para perdición de mi sos-
siego y fin de mi vida — y esto señalando a su
15 esposa — en los bragos de vn gallardo mancebo,
que en la estancia desta pestífera dueña
aora esta encerrado.»
Apenas acabó estas vltimas palabras Carri-
zales, quando a Leonora se le cubrió el cora-
20 gon, y en las mismas rodillas de su marido se
cayo desmayada. Perdió la color Marialonso,
y a las gargantas de los padres de Leonora se
les atraueso vn nudo que no les dexaua hablar
palabra. Pero prosiguiendo adelante Carriza-
25 les, dixo:
"La venganga que pienso tomar desta afrenta,
no es ni ha de ser de las que ordinariamente
suelen tomarse. Pues quiero que, assi como yo
fuy estremado en lo que hize, assi sea la ven-
30 ganga que tomaré, tomándola de mi mismo,
como del mas culpado en este delito, que deuie-